Autoridades ecuatorianas detuvieron este jueves a dos personas en relación con el asesinato el pasado miércoles del fiscal César Suárez, quien llevaba el caso del asalto a un canal de televisión el 9 de enero, en medio de la creciente ola de violencia del narcotráfico, el terrorismo y el crimen organizado. En la operación también se incautaron varias armas y dos vehículos, se explicó.
El fiscal ecuatoriano César Suárez, que se ocupaba de la investigación sobre la toma de un canal de televisión pública por parte de una banda de narcotraficantes el 9 de enero, fue asesinado a tiros este miércoles en Guayaquil, lo que se suma a la ola de delincuencia y violencia en el país sudamericano. Suárez recibió más de 20 disparos, según se informó. Se han asignado al caso “unidades especializadas” de la Policía Nacional.
El Presidente de Chile, Gabriel Boric Font, dijo este lunes durante un evento en la Región de Coquimbo que su administración necesita hacer cosas para no tener que pasar por la crisis que vive Ecuador. “Tenemos que preguntarnos cómo hacemos las cosas para no llegar a ese lugar”, subrayó.
Sólo cinco de los 48 reos que se fugaron este lunes de la cárcel de Esmeraldas fueron recapturados en el transcurso del día, según fuentes del gobierno del presidente ecuatoriano Daniel Noboa citadas por medios locales.
Las fuerzas de Ecuador retomaron el control de todas las prisiones del país y liberaron a unos 150 agentes correccionales que permanecían secuestrados por los reclusos amotinados, según se informó el pasado fin de semana. Un guardia murió durante un tiroteo, se infrmó asimismo.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, dijo este viernes que su gobierno aceptará la cooperación militar ofrecida por Argentina y Estados Unidos, entre otros países, porque la situación no permite que los egos se interpongan.
Las autoridades ecuatorianas confirmaron este jueves que las bandas de narcotraficantes seguían teniendo un total de 178 rehenes en las cárceles de todo el país, mientras que el número de víctimas tras cuatro días de agitación interna se actualizó a 16, tras represalias de los forajidos coomo consecuencia de las acciones de las fuerzas del orden. En este escenario, la vida cotidiana vuelve poco a poco a la normalidad.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, subrayó este miércoles que estamos en guerra y no voy a ceder. Hizo estas declaraciones un día después de que múltiples levantamientos de grupos de narcotraficantes, especialmente en Quito y Guayaquil, causaran al menos 18 muertos y más de 300 detenidos, además de los heridos, por lo que el jefe de Estado declaró un conflicto armado interno contra organizaciones terroristas que se cree que cuentan con 20.000 miembros.
Al menos ocho personas murieron, muchas otras resultaron heridas y decenas fueron detenidas en una ola de violencia de bandas de narcotraficantes que se extendió el martes por todo Ecuador pero más específicamente en Quito y Guayaquil y que tuvo como objetivos concretos las prisiones del país, un canal de televisión y un campus universitario, según se informó.
El gobierno peruano de la presidenta Dina Boluarte ordenó este martes el despliegue de tropas y fuerzas del orden en los 1.500 kilómetros de frontera con Ecuador para evitar el cruce de bandas de narcotraficantes alzadas en armas, se informó en Lima.