El ex presidente brasileño Lula da Silva aceptó este miércoles ser el jefe del gabinete de la mandataria Dilma Rousseff, con quien acordó su incorporación al gobierno con amplios poderes. Su nombramiento, que además le garantizará fueros privilegiados en la causa por corrupción en Petrobras, fue criticado por la oposición.
El presidente de la mayor y más influyente patronal del Brasil, Paulo Skaf -que dirige la Federación de Industrias de Sao Paulo (Fiesp)-, afirmó en un breve comunicado que la llegada de Lula al ministerio de la Presidencia es un golpe contra la nación brasileña.
Las graves denuncias contra Dilma Rousseff y su antecesor Lula da Silva hechas por el senador oficialista Delcidio Amaral cayeron como una bomba en el Gobierno brasileño, que planea una estrategia para salvar el mandato de la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT).
La presidente de Brasil, Dilma Rousseff, habría ofrecido a su antecesor Lula da Silva tomar el liderazgo de uno de sus ministerios, con el fin de evitar que sea enviado a prisión por su participación en el la trama de corrupción del caso Lava Jato.
El presidente de La Federación de las Industrias del Estado de Sao Paulo (Fiesp), Paulo Skaf, anunció este martes el respaldo de esa entidad y de otras organizaciones empresariales a las manifestaciones previstas para el próximo domingo en todo Brasil contra el Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, pidió este martes paz y tolerancia frente a la crisis política que atraviesa el país, pocos días antes de protestas en contra y a favor de su gobierno que podrían generar enfrentamientos en las calles.
Tras el interrogatorio coercitivo que reavivara la hoguera del mayor escándalo de corrupción de la historia en Brasil, la presidenta Dilma Rousseff visitó a su mentor y padrino político, Lula da Silva quien anticipó que tomaría las calles para que el pueblo lo apoyara y no descarta su aspiración presidencial para el 2018.
La operación que la Policía brasileña desarrolla contra el ex presidente Lula da Silva y su familia “es el principio del fin” del gobierno de Dilma Rousseff, según afirmó el diputado opositor Antonio Imbassahy.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, defendió este viernes a su antecesor y padrino político Lula da Silva y también descalificó a uno de los delatores de la corrupción en la estatal Petrobras, que los implicó a ambos (Lula y Dilma) en esos asuntos.
Los partidos de oposición en Brasil manifestaron este martes su apoyo a la jornada de protestas del 13 de marzo próximo contra la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, convocada en las redes sociales por movimientos de la sociedad civil. Los principales partidos informaron en un comunicado de que decidieron anunciar “su integral apoyo a las manifestaciones” del 13 de marzo tras constatar “el continuo agravamiento de la crisis política, económica y moral que viene devastando al país”.