La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró a los empresarios agrícolas que el acuerdo comercial que ese sector exige entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) aún no se concreta por “la resistencia” de algunos países europeos.
Las irregularidades en torno a la petrolera estatal Petrobras, la principal empresa de Brasil han resurgido a meses de los comicios presidenciales, en tanto desde el gobierno se acusa a la oposición de crear algún escándalo, no importa si es cierto o falso.
El candidato presidencial opositor Aécio Neves prometió bajar el costo de producción para los empresarios agropecuarios de Brasil y aseguró que hay que desterrar la idea de que la actividad agrícola es perjudicial para el medio ambiente.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, se reunió con la presidenta de Brasil Dilma Rousseff, en el marco de una visita que dejó 700 millones de dólares en créditos nipones para la agricultura y la industria petrolera brasileña.
La producción industrial brasileña cayó 6,9 % en junio respecto del mismo mes de 2013, el peor resultado mensual desde 2009 y para el cual contribuyó el cese de algunas actividades productivas durante el Mundial de fútbol Brasil 2014, informó el Gobierno.
El presidente del grupo Santander, el español Emilio Botín, admitió en una conferencia de prensa que las relaciones entre la institución y el Gobierno brasileño no estaban atravesando por el mejor momento, y reveló que el banco se había disculpado con la Presidenta Dilma Rousseff.
El lema de campaña será: 'La verdad va a vencer al pesimismo'. Lo que vence al pesimismo es la verdad de los hechos. Y los hechos están a la vista”, asegura la presidente Dilma Rousseff que ya se encuentra dedicada de lleno a los comicios del 5 de octubre.
La minera brasileña Vale, el mayor productora mundial de hierro, informó de que obtuvo un beneficio de 3.187 millones de Reales (unos 1.448,6 millones de dólares) en el segundo trimestre, casi cuatro veces mayor al del mismo período de 2013 (832 millones de Reales o 378,2 millones de dólares).
El sector público brasileño acumuló en el primer semestre del año un superávit primario de 29.380 millones de Reales (unos 13.354,5 millones de dólares), el menor saldo para el período en los últimos trece años, informó el Banco Central.
Las quejas de los empresarios respecto al Mercosur se colaron en la campaña de cara a las elecciones de octubre próximo en Brasil, durante un evento en el que participaron los principales candidatos presidenciales, encabezados por la actual jefa de Estado, Dilma Rousseff.