El presidente Juan Manuel Santos, privilegió este miércoles la calidad del contenido del acuerdo de paz con las FARC, antes que la fecha que las partes se impusieron para cerrar los diálogos con los que se busca poner fin a seis décadas de conflicto armado.
El canciller de Colombia, María Angela Holguín, de visita en Madrid rebajó las expectativas del proceso de paz en Colombia. De paso por la capital española para presidir la reunión de embajadores preparatoria de la Cumbre Iberoamericana de octubre en Cartagena de Indias, Holguín ha admitido que el 23 de marzo sólo se firmará algo del pretendido y muy anunciado acuerdo de paz; no sé si el acuerdo, propiamente dicho, ha puntualizado.
El apoyo a la negociación de paz del Gobierno de Colombia con las FARC cayó a un 54%, un reflejo de la falta de confianza con los plazos establecidos para la firma de un acuerdo y de la incertidumbre por una violación a las reglas de las conversaciones, reveló una encuesta de Gallup.
A un mes de la fecha fijada por el gobierno de Colombia y las FARC para la firma de la paz, el próximo 23 de marzo, nadie se aventura a confirmar que en este plazo se llegue al acuerdo que terminará con 50 años de guerra.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, advirtió a las FARC que se les “agotó el tiempo” para terminar las conversaciones de paz en la fecha convenida, el 23 de marzo, y recuperar así la confianza ciudadana tras la polémica visita al país de delegados junto a guerrilleros armados.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama anunció el plan “Paz Colombia”, un nuevo acuerdo bilateral entre ambos países, para el que solicitará al Congreso 450 millones de dólares en el presupuesto del año fiscal 2017, una cifra superior a los 296 millones otorgados este año.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, promulgó su ley insignia de promoción rural, para impulsar la explotación de más de 7 millones de hectáreas, decisión muy cuestionada por la oposición de izquierda, ONG’s y las FARC.
Los negociadores de paz del Gobierno colombiano y las FARC serán quienes definirán las zonas en las que se concentrarán los guerrilleros para dejar las armas y comenzar el alto el fuego bilateral y definitivo bajo la supervisión de Naciones Unidas.
El asesinato en 1983 del padre del ex presidente colombiano Álvaro Uribe presuntamente a manos de las FARC fue cuestionado por esa guerrilla aunque el partido del actual senador, el Centro Democrático, reiteró la versión del ex mandatario.
El porte de armas estará prohibido durante todo el 2016 en Colombia para disminuir los delitos y los crímenes, anunció este martes el presidente Juan Manuel Santos.