La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) informó el lunes que recibió autorización de Nicaragua para realizar una visita al país y evaluar la situación tras las protestas contra el presidente Daniel Ortega que han dejado decenas de muertos.
Las manifestaciones contra el Gobierno comenzaron a mediados de abril como reacción a una reforma al sistema de seguridad social, pero se ampliaron para incluir demandas de justicia por la muerte de decenas de estudiantes tras una violenta represión policial.
Los inconformes también exigen la renuncia de Ortega, un ex guerrillero izquierdista a quien sus críticos acusan de intentar establecer una dictadura familiar.
Según una carta divulgada el lunes por el secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrāo, en su cuenta de Twitter, el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, dijo que las autoridades del país centroamericano habían permitido que los observadores lleven a cabo la visita.
“El Gobierno de la República de Nicaragua expresa su anuencia para que en el menor tiempo posible la Comisión realice dicha visita de trabajo con el objeto de observar ‘in loco’ la situación de los Derechos Humanos en Nicaragua”, de acuerdo con el mensaje firmado por Moncada.
Junto con la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), la CIDH conforma el sistema interamericano de protección de los derechos humanos y tiene su sede en Washington.
La ONU ha dicho que al menos 47 personas murieron durante las protestas, la mayoría de ellos estudiantes, y ha pedido al gobierno de Ortega que la deje investigar las muertes. Las cifras de las últimas protestas indican que los muertos suman cerca de sesenta.