Cientos de miles de personas estallaron de júbilo este domingo en las calles de las principales ciudades de Brasil al confirmarse el triunfo de Jair Messias Bolsonaro. Pero una escena sobresalió por sobre las demás: el ejército salió a festejar el triunfo de su ex compañero.
Jair Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar brasileña, ha sido elegido como el nuevo presidente de la mayor potencia de América Latina tras una de las campañas más divididas y tensas de la historia del país obteniendo el 55 % de los votos tras el escrutinio de más del 99% de las urnas.
Uno en Sao Pablo y el otro en Rio de Janeiro; los candidatos Jair Bolsonaro y Fernando Haddad emitieron sus votos esta mañana con la confianza que impulsan las encuestas al primero, y la esperanza del segundo de revertir esta ventaja, advirtiendo la amenaza que Bolsonaro representa para la democracia de Brasil en las elecciones presidenciales mas polarizadas de la historia reciente del país.
El candidato progresista Fernando Haddad recortó de 18 a 12 puntos la amplia distancia que le separa de su rival en la segunda vuelta de las presidenciales del domingo en Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, según un nuevo sondeo divulgado el jueves. De acuerdo con la encuesta elaborada por la firma Datafolha, Bolsonaro ganaría los comicios con un 56% de los votos válidos frente al 44% que obtendría Haddad, sucesor del encarcelado ex presidente Lula da Silva como candidato del Partido de los Trabajadores (PT).
La amplia ventaja en los sondeos que tiene el conservador Jair Bolsonaro frente al progresista Fernando Haddad, su rival en las presidenciales en Brasil, llevaron al primero a preocuparse más con su eventual Gobierno y al segundo a buscar más votos.
La evaluación es de la especialista en relaciones internacionales Andrea Ribeiro Hoffmann, profesora de la Pontificia Universidad Católica (PUC) de Río de Janeiro y para quien Bolsonaro puede “revertir” todo lo impulsado en política exterior por los gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT), primero con Lula (2003-2010) y después con su ahijada política Dilma Rousseff (2011-2016).
A escasos días de la segunda vuelta electoral, el candidato ultraderechista Jair Bolsonaro, con un pie en el Palacio del Planalto según encuestas, volvió a encender su retórica “agresiva” al advertir que los “marginales rojos serán prohibidos” en Brasil.
La economía más grande de América Latina está a menos de una semana de elegir en las urnas a su próximo presidente, pero en el mercado ya tienen la decisión tomada. Y es que en los precios de la bolsa paulista ya está incorporada la victoria del candidato de ultraderecha Jair Bolsonaro, según el estratega jefe de XP Securities, Alberto Bernal.
Pese a que aún no se ha impuesto en el balotaje del próximo domingo, el candidato presidencial Jair Bolsonaro ya inició conversaciones para formar un bloque liberal en América Latina.
El candidato progresista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), reiteró las críticas en contra de su adversario en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil, el derechista Jair Bolsonaro. No es un candidato a la presidencia, es un jefe de milicia, sus hijos son milicianos, son matones, es gente quinta categoría, esa es la verdad, expresó el político en una rueda de prensa en la ciudad de Sao Luis, en el estado de Maranhao.