Los principales líderes políticos del Perú han visto reducida su aprobación luego de conocerse los primeros vínculos entre el caso de corrupción titulado Lava Jato, ocurrido en Brasil, que ha motivado la detención de altos directivos de empresas e integrantes de la coalición de gobierno de la presidenta Dilma Rousseff y de su mentor político, Lula da Silva.
Una debilitada presidenta brasileña Dilma Rousseff, lanzó este miércoles un fuerte contraataque afirmando su intención de permanecer en el cargo y enfatizó ante la graduación de una nueva promoción de diplomáticos que Brasil solo será respetado en el mundo en la medida en que se respete la “soberanía popular” y los resultados de las urnas.
El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, líder del oficialista Partido de los Trabajadores, puede ser nombrado ministro por la mandataria Dilma Rousseff como parte de una iniciativa para enfrentar la crisis política. La presidenta analizó junto a sus colaboradores la reforma de su gabinete y una de las posibilidades es el nombramiento de Lula da Silva.
Un nuevo cacerolazo se escuchó el jueves en varias ciudades de Brasil en momentos en que salía al aire una publicidad del gobernante Partido de los Trabajadores (PT) en el que intervinieron la presidenta Dilma Rousseff y su antecesor Luiz Inacio Lula da Silva.
Jose Dirceu, uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil fue jefe de gabinete del ex presidente brasileño Lula da Silva desde 2003 a 2005, cuando debió renunciar por estar involucrado en el mensalão, el escándalo por sobornos a opositores en el Congreso.
El ex ministro José Dirceu, el “hombre fuerte” del primer mandato del ex presidente brasileño Luiz Ignacio Lula da Silva y condenado por escándalos denunciados en 2005, volvió este lunes a prisión, pero ahora por la corrupción en Petrobras.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, es honrada y no está involucrada en actos de corrupción, dijo el ex presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), a la revista alemana Capital.
El ex presidente de Brasil, Lula da Silva ha querellado a cuatro periodistas de la revista Veja debido a un artículo en el que se lo involucra en el escándalo de corrupción en la empresa estatal Petrobras, al tiempo que el ex canciller Celso Amorim calificó como absurdas las acusaciones al ex mandatario sobre tráfico de influencia a favor de compañías privadas.
El Ministerio Público de Brasil inició un proceso disciplinario contra el fiscal que abrió una investigación para determinar si el expresidente Lula da Silva incurrió en el delito de tráfico de influencias para favorecer a una constructora, informaron fuentes oficiales.
El primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, negó que el ex presidente brasileño Lula da Silva intentara favorecer a una empresa brasileña para que fuera beneficiada en los procesos de privatización realizados en Portugal.