El ex mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción, continúa como favorito para las elecciones presidenciales de octubre próximo, según una encuesta. De acuerdo con el sondeo de la firma Datafolha, publicada por el periódico Folha de Sao Paulo, Lula (2003-2010) tiene el 30% de la intención de voto de los brasileños, a pesar de cumplir una pena de 12 años por corrupción y lavado de dinero que lo inhabilita electoralmente por haber sido condenado por un tribunal colegiado en segunda instancia.
El candidato de extrema derecha a la presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro, se desvivió por dar su respaldo a una huelga de camioneros que paralizó al país y forzó al gobierno a restablecer costosos subsidios al combustible, y la estrategia podría fortalecer sus opciones en los comicios de octubre.
La popularidad de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, cayó del 42% al 23% este mes, un 19%, según una encuesta divulgada por la firma Datafolha, en medio de la crisis de la petrolera estatal Petrobras y el empeoramiento de las expectativas económicas del país.
El candidato presidencial opositor Aécio Neves prometió bajar el costo de producción para los empresarios agropecuarios de Brasil y aseguró que hay que desterrar la idea de que la actividad agrícola es perjudicial para el medio ambiente.