El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, fue muy elogiado por su discurso ante los productores agrícolas de su país y de Argentina, donde abordó el tema de la libertad.
El general venezolano Raúl Baduel, ex aliado del presidente Hugo Chávez, quien luego se convirtió en uno de los presos políticos más notorios del país, murió este martes de COVID-19 a la edad de 66 años y mientras aún estaba encarcelado.
Un estudio reciente de la encuestadora Cifra mostró que el 77% de los uruguayos estaban a favor de los requisitos de vacunación anti COVID-19 para las personas que deseen asistir a estadios de fútbol, cines o conciertos, se anunció este martes en Montevideo.
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, firmó este lunes el decreto que obliga a todos los funcionarios a vacunarse contra el COVID-19 y también permite que los empleadores privados sigan su ejemplo.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, planteó este lunes una objeción a ser etiquetado como un negacionista a consecuencia de su enfoque sobre la pandemia de COVID-19, que ha matado oficialmente a más de 600.000 personas en el país más grande de América del Sur.
La aerolínea estadounidense Southwest Airlines canceló una gran cantidad de vuelos durante el fin de semana debido a las condiciones climáticas y las interrupciones del control del tráfico aéreo (ATC). Tanto la empresa como los sindicatos de pilotos negaron que los eventos estuvieran relacionados con la vacunación obligatoria contra la COVID-19.
Los Gobiernos de todo el mundo respondieron a los impactos sanitarios y económicos de la COVID-19 con enormes paquetes de estímulo fiscal, monetario y financiero.
Al presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no se le permitió ingresar a un estadio de fútbol este domingo para ver el partido de Gremio contra Santos porque no estaba vacunado contra el COVID-19.
Las autoridades paraguayas están considerando levantar las restricciones sanitarias de horario de circulación a nivel nacional ante el bajo nivel de contagio de COVID-19 registrado en los últimos días.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que su país había sufrido relativamente poco por la pandemia de COVID-19 y se preguntaba “¿por qué no llaman genocida al [presidente estadounidense Joseph] Biden?”