El Gobierno de Brasil lanzó este jueves un plan integral para combatir el racismo en el deporte, centrado en la concienciación, la vigilancia y la educación. Entre las acciones clave se incluyen la creación de un sello y un premio para entidades deportivas antirracistas, el lanzamiento de campañas educativas en eventos y el desarrollo de una plataforma digital para el seguimiento de datos sobre discriminación racial. La iniciativa, apoyada por los ministros Anielle Franco (Igualdad Racial) y André Fufuca (Deporte), prioriza la colaboración con la justicia deportiva, los medios de comunicación y los programas gubernamentales para promover la igualdad y la inclusión.
Este esfuerzo aborda el racismo persistente en el deporte brasileño, evidenciado por incidentes como los insultos racistas contra el futbolista Vinícius Júnior en España en 2023, que provocaron indignación mundial.
El deporte debe ser un espacio de unión y respeto. Necesitamos políticas públicas eficaces para erradicar el racismo y promover la igualdad dentro y fuera de los estadios deportivos, declaró Fufuca.
El racismo en el deporte es un reflejo del racismo sistémico presente en la sociedad, y combatirlo es urgente. Con esta alianza, queremos avanzar para garantizar entornos deportivos guiados por la igualdad y el respeto, que sean espacios seguros y acogedores para todos, señaló Franco.
La discriminación volvió a ser noticia en los últimos días cuando jugadores brasileños del Palmeiras de Sao Paulo fueron objeto de burlas (llamados simios) en Asunción (Paraguay) por un aficionado del Cerro Porteño durante un partido de la Copa Libertadores Sub-20. El club paraguayo recibió una multa de US$ 50.000 deberá jugar a puertas cerradas, una medida considerada muy indulgente en Brasil, tanto que algunos directivos amenazaron con retirar al país de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).
Para colmo, al ser preguntado si se imaginaba una Copa Libertadores sin equipos brasileños, el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, dijo que sería como Tarzán sin Chita.
Ante este panorama, la Conmebol creó este jueves un grupo de trabajo liderado por el exjugador brasileño Ronaldo para combatir el racismo y la violencia en el fútbol. Ronaldo había aspirado a presidir la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), pero abandonó su candidatura debido al escaso apoyo. Otras ex estrellas del fútbol que se unieron al grupo durante la ceremonia del jueves en la sede de la Conmebol en Luque (Paraguay) fueron Mauro Silva, Carlitos Tévez, Claudio Caniggia y Fatma Samoura.
Actuamos hoy aquí con responsabilidad y unidad para afrontar los desafíos que tenemos por delante, superarlos y continuar por la senda del crecimiento. No queremos debatir el pasado, queremos debatir el futuro. Todo lo que se dice aquí es para enriquecer y mejorar nuestro deporte, declaró Domínguez.
Entre las medidas anunciadas se encuentra la creación de una lista negra de personas con prohibición de entrada a los estadios, además de programas educativos destinados a promover la concienciación y prevenir el racismo.