Una semana después de la segunda vuelta presidencial, el candidato de izquierda Pedro Castillo superó a la conservadora Keiko Fujimori por alrededor de 70.000 votos para convertirse en el nuevo presidente de Perú. Pero no puede celebrar todavía hasta que el Jurado Nacional Electoral (JNE) resuelva una petición de su oponente para anular unos 200.000 votos.
Castillo es un maestro rural con un discurso marxista, pero un conservador social que se opone a políticas como el aborto o el matrimonio entre personas del mismo sexo. Mientras tanto, la derechista Fujimori reivindica el legado de su padre, el ex presidente Alberto Fujimori, quien cumple condena por crímenes de lesa humanidad. Ha llegado a las elecciones con investigaciones abiertas por presunto financiamiento ilegal de sus campañas presidenciales de 2011 y 2016. Defiende un modelo de continuidad basado en el capitalismo.
La corrupción, la desigualdad de oportunidades y la pandemia de coronavirus dividen a los peruanos.
Las actas objetadas por Fujimori presentan errores en la suma de votos, no son legibles o carecen de la firma de los miembros de la mesa, se informó.
Un pleno del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) revisará estos temas el lunes 14 de junio, a partir de las 9.30 am hora local, según la cuenta oficial de Twitter del JNE, y se retransmitirá a través de JNETV y Facebook.
Fuerza Popular de Fujimori ha disputado 887 registros de votación, que representan casi 177,400 votos. Si se anulan, podría convertirse en la ganadora.
Otras objeciones planteadas por el equipo legal de Fujimori fueron la presencia de hermanos en el mismo colegio electoral, firmas supuestamente falsificadas o faltantes, y el hecho de que la mayoría de esas irregularidades se han detectado donde los votos de Castillo superaron abrumadoramente a los de Fujimori.
Miguel Torres, vocero de Fuerza Popular de Fujimori dijo que estaban “evaluando con varios abogados penalistas las acciones que se van a tomar contra las personas involucradas, especialmente en el tema de robo de firmas [...] Estamos hablando sobre personas que se hacen pasar por otras personas que ocupan su espacio o el espacio que les había dado el sorteo”.