Dos aviones de la aerolínea estatal Conviasa despegaron este lunes desde El Paso, Texas, con los primeros venezolanos deportados bajo el acuerdo entre el presidente estadounidense Donald Trump y su contraparte, Nicolás Maduro. La operación se produce apenas dos semanas después del encuentro entre Maduro y el enviado especial de Trump, Richard Grenell, en Caracas, un momento simbólico en el que la bandera de Estados Unidos volvió a ondear en el Palacio de Miraflores.
Tras reunirse con el gobernante venezolano Nicolás Maduro, el enviado del presidente estadounidense Donald Trump a Caracas, Richard Grenell, abordó su vuelo de regreso a casa junto a seis estadounidenses que habían sido tomados como rehenes por el régimen bolivariano.
Richard Grenell, el enviado especial designado por el presidente de Estados Unidos Donald Trump, se reunió este viernes con el mandatario venezolano Nicolás Maduro en el Palacio Presidencial de Miraflores, en Caracas. Durante el encuentro, Grenell transmitió un mensaje innegociable del funcionario de la Casa Blanca Mauricio Claver-Carone: Maduro debe “recibir de vuelta a los criminales venezolanos que han sido enviados a Estados Unidos”.
El diplomático de carrera estadounidense Richard Grenell aterrizó este viernes en Caracas presumiblemente para participar en la devolución de un grupo de deportados venezolanos a cambio de ciudadanos estadounidenses detenidos por el régimen bolivariano en el país sudamericano. Sin embargo, ninguno de los dos gobiernos ha hecho pública su agenda, por lo que el alcance de la misión es en su mayoría especulación mediática.