Las autoridades brasileñas informaron este domingo que al menos 25 personas habían muerto debido a las fuertes lluvias que afectaron principalmente a Río de Janeiro y Espírito Santo durante el fin de semana.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este domingo que viajará a primera hora del lunes a Recife para comprobar la devastación causada por un nuevo temporal de lluvias en el noreste del país, que ha dejado al menos 84 muertos, y más de 50 desaparecidos según cifras que se actualizan constantemente.
Una semana después de las lluvias más intensas registradas en la ciudad brasileña de Petrópolis, el número de víctimas mortales llegó este martes a 195, mientras que 69 personas siguen desaparecidas y otras 811 permanecen sin hogar tras ser evacuadas.
Las víctimas mortales en la ciudad brasileña de Petrópolis debido a lluvias y deslizamientos de tierra sin precedentes han alcanzado un número récord de 176, en un lugar donde otros desastres naturales hace años ya han dejado cientos de bajas.
Las lluvias han seguido cayendo en la ciudad brasileña de Petrópolis, en el estado brasileño de Río de Janeiro, lo que ha afectado los trabajos de socorro y ha aumentado el número de muertos a 136, se informó este viernes, mientras que el número de personas desaparecidas llegó a 213. Además, unas 700 personas seguían refugiadas en escuelas e iglesias tras ser evacuadas de sus hogares.
Los trabajos de socorro en Petrópolis tuvieron que detenerse este jueves debido a nuevas lluvias, pero el número de muertos siguió aumentando con respecto a las cifras anteriores, alcanzando los 117 decesos y al menos 116 personas desaparecidas.
Las autoridades de Río de Janeiro informaron este miércoles de al menos 80 víctimas fatales, mientras continuaban los trabajos de socorro tras los deslizamientos de tierra e inundaciones del martes en el área de Petrópolis.
Las autoridades de la ciudad brasileña de Petrópolis, en el estado de Río de Janeiro, informaron este martes que al menos 23 personas murieron y cientos fueron evacuadas de sus hogares debido a las fuertes lluvias y las posteriores inundaciones en la zona montañosa de la ciudad.