Las autoridades de la ciudad brasileña de Petrópolis, en el estado de Río de Janeiro, informaron este martes que al menos 23 personas murieron y cientos fueron evacuadas de sus hogares debido a las fuertes lluvias y las posteriores inundaciones en la zona montañosa de la ciudad.
Los equipos de socorro temen que el número de muertos pueda aumentar en las próximas horas, se informó. Las precipitaciones han provocado inundaciones en las calles, deslizamientos de tierra y cortes de luz y agua.
El presidente Jair Bolsonaro ha enviado un mensaje de apoyo a las víctimas. El jefe de Estado se encuentra actualmente en Moscú para reunirse con su colega ruso Vladimir Putin.
“Estamos enviando toda la ayuda. Mañana a partir de las 6:00 am (hora local) todos van a enviar equipos y maquinarias para que podamos atender a la población lo más rápido posible y reducir el terrible impacto de estas lluvias”, dijo el gobernador de Río de Janeiro, Cláudio Castro.
Regresaré el próximo viernes y, aunque lejos, seguimos comprometidos con ayudar a los demás. Dios consuele a las familias de las víctimas, publicó Bolsonaro en Twitter.
Los residentes de las áreas de riesgo están siendo dirigidos a los puntos de apoyo después de que las precipitaciones alcanzaran los 126 milímetros en solo una hora y los 25,8 centímetros en tres horas, casi tanto como durante los 30 días anteriores combinados.
Más de 180 socorristas han sido desplegados en la zona, informó el Departamento de Bomberos del Estado.
Las imágenes publicadas en las redes sociales mostraban autos y casas arrastrados por deslizamientos de tierra y agua que se arremolinaba en la ciudad de Petrópolis y los distritosaledaños.
Petrópolis, a 68 km de la ciudad de Río de Janeiro, alberga el palacio de verano de la antigua familia imperial brasileña, ahora convertido en el Museo Imperial Brasileño.