A pesar de las tempranas e importantes inversiones en vigilancia y colaboración, los países de las Américas son todavía vulnerables a la resistencia a los antibióticos y deben ser parte de un esfuerzo mundial urgente y coordinado para hacer frente a esta grave y actual amenaza para la salud pública.
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO, elogió el esfuerzo por reducir el hambre en América Latina y el Caribe, donde este problema afecta al 7,9 % de la población, pero advirtió del riesgo que conlleva el incremento de los índices de obesidad y sobrepeso.