Unos 600 delegados del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ratificaron el viernes al Mandatario Nicolás Maduro como su candidato para los próximos comicios presidenciales, que por decisión de la Asamblea Nacional Constituyente se celebrarán antes de mayo.
Las elecciones no se decretan u ordenan, se convocan. Y es que el régimen venezolano, con este nuevo disparate, no hace sino más que desvelar el asesinato, no sólo de personas que piensan distinto de maneras tan atroces como ejecutándolos extrajudicialmente –con un ejército completo– para callar y escarmentar, sino también el asesinato de los principios democráticos y republicanos fundamentales mientras pisotean la constitución del país.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, calificó como “un paso correcto y acertado” la decisión de la Asamblea Nacional Constituyente de convocar por decreto las elecciones presidenciales para antes del 30 de abril de este año.
Entre los sancionados están el número dos del chavismo, Diosdado Cabello; Néstor Reverol –ministro de Justicia– y Maikel Moreno –presidente del Tribunal Supremo de Justicia–. Se trata de nuevas sanciones individuales, que incluyen la congelación de activos y la prohibición de viajar a los países del bloque europeo a siete funcionarios venezolanos.
El primer vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, dijo que los ganadores de los comicios regionales deben ser juramentados ante la Asamblea Nacional Constituyente, dominada por el oficialismo, sino no podrán asumir.
Luisa Ortega, destituida como fiscala de Venezuela por la controvertida Asamblea Constituyente promovida por el presidente Nicolás Maduro, entregó a la Fiscalía General de México información sobre casos que se investigan en su país.
La Asamblea Nacional Constituyente instaurada por el oficialismo en Venezuela aprobó la apertura de un juicio histórico contra los dirigentes de la oposición por supuestamente pedir y respaldar las sanciones económicas dictadas por Estados Unidos contra el país.
La ex fiscal venezolana Luisa Ortega Díaz, quien salió de su país tras ser acusada de traición por el gobierno, afirmó este miércoles en Brasilia que posee pruebas en al menos cuatro países para denunciar por corrupción al presidente Nicolás Maduro y al número dos del chavismo, Diosdado Cabello, y advirtió que el caso puede generar inestabilidad en la región.
Diosdado Cabello, el número dos del chavismo y hombre fuerte del régimen, planteó que la Asamblea Constituyente, controlada por el gobierno, expida certificados de buena conducta a los candidatos de la oposición que quieran participar en la elección de gobernadores, prevista para el 10 de diciembre.
La Asamblea Constituyente del presidente Nicolás Maduro se instaló este viernes en Venezuela, pese al rechazo internacional, las dudas por un supuesto fraude en su elección y las protestas opositoras que denuncian el fin de la democracia en el país.