De Moraes fue elegido tras la jubilación del magistrado Barroso El magistrado del Tribunal Supremo Federal (STF) de Brasil Alexandre De Moraes dictaminó este miércoles que el gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, deberá comparecer en una audiencia el 3 de noviembre para rendir cuentas sobre los resultados de la Operación Contención, que dejó al menos 119 muertos.
La operación fue llevada a cabo el martes pasado por la policía civil y militar de Río de Janeiro en las favelas de Alemão y Penha para ejecutar 180 órdenes de allanamiento y 100 órdenes de detención, 30 de las cuales fueron emitidas por el estado de Pará. Según el gobierno de Río, el objetivo era contener la expansión del grupo criminal Comando Vermelho. También se realizaron 113 detenciones, 33 de ellas de personas procedentes de otros estados que operaban en Río de Janeiro.
Los enfrentamientos y las represalias perpetradas por el grupo criminal afectaron las autopistas, los servicios públicos e incluso el funcionamiento de empresas de la ciudad, que cerraron sus puertas temprano y despidieron a sus empleados.
Castro calificó la operación como un éxito, pero defensores de derechos humanos la denunciaron como una masacre. Familiares de los fallecidos señalan que los cuerpos presentaban signos de ejecución, como disparos en la cabeza e incluso mutilaciones.
La decisión del juez se emitió en el marco del caso conocido como ADPF das Favelas, en el que la Corte ya ha adoptado medidas para combatir la letalidad policial en la capital del estado.
De Moraes fue designado para tomar decisiones urgentes sobre el caso ante la ausencia de un relator tras la jubilación, la semana pasada, del magistrado Luís Roberto Barroso, explicó Agencia Brasil.
Por otra parte, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, expresó su profunda preocupación por el número de víctimas y exigió una investigación inmediata y garantías de que cualquier actuación policial se ajustará a las normas internacionales de derechos humanos, declaró el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric. “Puedo afirmar que el secretario general está profundamente preocupado por el elevado número de víctimas durante el operativo policial de ayer en las favelas de Río de Janeiro”, señaló Dujarric en un comunicado.
Expertos entrevistados por Agência Brasil calificaron la Operación Contención como una de las más mortíferas de la historia reciente del país y afirmaron que la población estuvo “en primera línea de fuego”. Para ellos, el uso masivo de la fuerza evidencia la persistencia de estrategias que provocan un gran número de muertes y afectan principalmente a los residentes de zonas vulnerables.
También el miércoles, De Moraes explicó que la amnistía para el expresidente Bolsonaro “no era posible” porque el sistema judicial brasileño “funcionó con total independencia y autonomía” y que todo esto “no alteró en lo más mínimo el proceso legal en Brasil”. Bolsonaro fue condenado a 27 años de prisión por intentar un golpe de Estado contra Luiz Inácio Lula da Silva.
“No podemos confundir pacificación con impunidad”. Estamos hablando de una organización criminal que intentó atacar instituciones, que intentó clausurar el Tribunal Superior Electoral, que planeó el asesinato del presidente electo y del vicepresidente, enfatizó.