La inflación en Bolivia aumentó un 0,9% el mes pasado, lo que elevó la tasa acumulada para el primer trimestre de 2025 al 5,95%, según informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Estas cifras fueron significativamente superiores al 1,31% registrado en el mismo período de 2024 y representaron el 79,3% de la meta anual del gobierno del 7,5%.
Los principales impulsores de los precios fueron el pollo (4,55%), el plátano (6,33%), la papa (3,64%), la arveja (5,76%) y la cebolla (3,30%). Ciudades como Tarija (1,93%), Sucre (1,14%) y Trinidad (1,10%) experimentaron los mayores aumentos de precios, con Cobija registrando una caída del 0,53%.
En este escenario, la inflación interanual alcanzó el 15,01%. Mientras tanto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta un total del 15,8% para 2025, citando el limitado margen fiscal y los desafíos derivados de la escasez de combustible, las protestas y las inundaciones que afectan la producción de alimentos.
Si bien el INE observó una tendencia a la baja en abril debido a la estabilidad del suministro de combustible y la ausencia de bloqueos, los economistas instaron a implementar políticas para controlar la inflación en medio de la tensión económica y una proyección de crecimiento del PIB de tan solo el 1,1% este año y el 0,9% en 2026.
El director del INE, Humberto Arandia, destacó que las cifras de abril fueron las más bajas en siete meses después de que los bloqueos de octubre, sumados a las condiciones climáticas desfavorables, dañaran aún más la economía. Arandia también explicó que los aumentos en los precios de la cebolla y la carne de res se debieron a factores estacionales.
La inflación oficial actual del 79,3% ha suscitado preocupación por un posible desbordamiento si persisten los factores que impulsan el alza de los precios. El año pasado, Bolivia cerró con una tasa de inflación acumulada del 9,97%, la más alta desde 2008, superando ampliamente la meta del gobierno del 3,60%.
No se puede descartar una nueva escasez de combustible, dada la necesidad de divisas para financiar las importaciones. Además, tras fuertes lluvias e inundaciones que afectaron la producción y distribución de alimentos, los expertos insisten en que se necesitan políticas públicas eficaces para controlar la inflación y mitigar los efectos de los factores externos e internos que presionan al alza los precios en una economía mayoritariamente subsidiada.