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JetSmart suprime ruta Buenos Aires-Montevideo
Las expectativas de JetSmart estuvieron lejos de cumplirse La aerolínea chilena de bajo coste JetSmart anunció que suprimirá la ruta Buenos Aires-Montevideo a partir del 1 de octubre, tras constatar que no era rentable, sobre todo cuando sin ninguna subvención del gobierno uruguayo. El servicio funcionaba desde hacía sólo cuatro meses.
La decisión de JetSmart «fue una desagradable sorpresa», declaró el Ministro de Relaciones Exteriores uruguayo, Omar Paganini, sobre los dos vuelos diarios entre los aeropuertos Jorge Newbery y Carrasco. Al no salir las cosas como estaban previstas, JetSmart solicitó al gobierno uruguayo una subvención de 100.000 dólares que no le fue concedida después de que las autoridades turísticas de Montevideo consideraran excesiva la cantidad.
La participación de la aerolínea de bajo coste había obligado a Aerolíneas Argentinas, el otro operador de la ruta, a ajustar sus tarifas para seguir siendo competitiva. Sin embargo, con el futuro de la aerolínea de bandera de Buenos Aires también en duda, el transporte aéreo entre las capitales de Argentina y Uruguay ha caído en la incertidumbre. El Gobierno Libertario del Presidente Javier Milei ya mantiene conversaciones para privatizar la compañía o algunos de sus servicios, en medio de crecientes protestas laborales que siguen afectando a los viajeros.
El CEO de JetSmart, Estuardo Ortiz, dijo al embajador de Uruguay en Buenos Aires, Carlos Enciso, que la compañía no tenía «un esquema de promoción específico ni incentivos suficientes» para mantener el servicio que comenzó a fines de mayo. Ortiz reconoció que JetSmart había experimentado «condiciones que no contribuyen a la sostenibilidad de la operación», lo que refuerza las dificultades que afrontan las aerolíneas cuando intentan establecer rutas en mercados altamente competitivos. La compañía había previsto 127.000 pasajeros durante su primer año de operación en esta ruta, pero la demanda se situó muy por debajo de esas cifras. JetSmart también citó la elevada presión fiscal y la competencia con otros medios de transporte como factores de la inviabilidad de la ruta.
Enciso afirmó que la conexión Montevideo-Buenos Aires había mostrado un «desempeño acorde con las expectativas», lo que indicaba que había perspectivas optimistas para su futuro. El diplomático expresó asimismo su «profunda preocupación», buscando abrir un «canal de comunicación» para analizar posibles alternativas que puedan revertir la situación.
Sin embargo, Ortiz se mostró escéptico dada la reticencia del gobierno uruguayo. El ejecutivo también insistió en que la ayuda de los gobiernos a las aerolíneas era una práctica común en otros lugares porque las rutas dependían totalmente de factores estacionales y de la demanda específica, lo que puede llevar a la suspensión temporal o a la cancelación permanente de ciertos servicios considerados insostenibles.
Cuando JetSmart anunció la nueva ruta en marzo durante una ceremonia en la residencia de Enciso, también había argumentado que el puente aéreo a Montevideo serviría como alimentador del servicio Aeroparque Jorge Newbery-Asunción. En ese entonces, se dijo que Enciso fue fundamental en la negociación desde 2021 para habilitar estos servicios.
