El Gobierno estadounidense del presidente Joseph Biden habría ofrecido al venezolano Nicolás Maduro una salida a la actual crisis a condición de que reconozca a Edmundo González Urrutia como ganador de las elecciones del 28 de julio, imprimió The Wall Street Journal (WSJ). Caracas lo rechazó rápidamente, dijo también el periódico.
Según una publicación en YouTube del reportero peruano Jaime Bayly, Biden dio a Maduro hasta el 5 de noviembre para dejar el poder o atenerse a las consecuencias. Es la misma fecha en la que la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, se enfrentará al expresidente republicano Donald Trump para ver quién llega al Despacho Oval el 20 de enero.
Biden, quien se bajó de la contienda ante su visible mal estado de salud para tal responsabilidad, aseguró a Maduro que no dejaría su cargo sin un gobierno democráticamente electo en Venezuela, que sería el de Edmundo González Urrutia, explicó Bayly.
Aunque Maduro pidió a Biden que no se entrometa en los asuntos internos de Venezuela, las negociaciones entre el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, y el representante del Consejo Nacional de Seguridad de la Casa Blanca, Daniel P. Erikson, siguen en pie, según el WSJ.
Maduro es buscado en EE.UU. por narcotráfico y hay una recompensa de 15 millones de dólares por su cabeza. Además, hay 10 millones de dólares para quien ayude a capturar a otros líderes venezolanos como Diosdado Cabello. Asimismo, Washington estaría intentando que Brasil, México y Colombia persuadan a Maduro y a sus acólitos para que acepten el acuerdo.
Sin embargo, las fuentes del WSJ admitieron que es poco probable que la amnistía tenga éxito. Un acuerdo similar fue ofrecido a Maduro durante conversaciones secretas en Qatar el año pasado, también escribió el WSJ.
Bayly explicó que a Maduro se le había ofrecido vivir en el exilio donde quisiera con todos los cargos en su contra retirados. Pero la palabra de Biden vale hasta el 20 de enero. Por otro lado, el posible regreso de Trump a la Casa Blanca podría inclinar la balanza. Durante su anterior administración (2017-2021), aplicó duras sanciones a Caracas que fueron suavizadas o levantadas bajo el Gobierno demócrata. En cualquier caso, Maduro desconfía de Washington, independientemente de quién habite la Casa Blanca, subrayó el WSJ.
A finales de 1989, Estados Unidos lanzó una exitosa operación militar para capturar al líder supremo panameño, Manuel Noriega, después de que éste se negara a reconocer a Guillermo Endara como ganador de las elecciones de ese mismo año. Sin embargo, se cree que el poderío militar de Venezuela es considerablemente mayor que el de Panamá, dadas las buenas relaciones entre Caracas y Moscú, La Habana, Pekín y Teherán.
Mientras se negocia una cumbre virtual para que Maduro revise la crisis actual con los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil, Andrés Manuel López Obrador de México y Gustavo Petro de Colombia, Bayly dijo que habría una ruptura en la postura de ese trío. Mientras Petro y AMLO no tendrían reparos en admitir el triunfo de Maduro, Lula -sostuvo Bayly- no estaba dispuesto a permitirlo sin que se exhibieran las actas de cada mesa de votación. Al respecto, dijo que Lula analizó la cuestión con Biden.