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Presidente brasileño anuncia alianza con Indonesia y Congo
Con su experiencia previa como presidente, Lula xdijo que “haremos más en cuatro años -proporcionalmente más- de lo que hicimos en ocho años”. En una entrevista televisiva exclusiva con motivo de sus primeros 100 días en el cargo, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció el lunes que se reunirá en junio con sus colegas de la República Democrática del Congo e Indonesia para lanzar una alianza entre los países que poseen las mayores selvas tropicales del planeta, informó la Agencia Brasil.
“Ya tengo, en junio, un compromiso con Congo, que está invitando a Brasil e Indonesia para realizar un gran encuentro de los tres países que tienen la mayor selva verde del mundo”, dijo Lula.
La creación de la alianza había sido anunciada durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27), celebrada en Egipto el año pasado, y a la que asistió Lula, entonces presidente electo.
El objetivo de la coalición, según el gobierno brasileño, es valorizar la biodiversidad de los países y promover una remuneración justa por los servicios ecosistémicos prestados por las tres naciones - especialmente a través de créditos de carbono de los bosques nativos.
La alianza señala a la comunidad internacional que la cuestión de la conservación y el uso sostenible de este bien ambiental debe ser liderada por quienes poseen los principales bosques del mundo.
Lula dijo que es necesario involucrar a otros países sudamericanos que también poseen porciones de la selva amazónica y añadió que sugeriría al gobierno del Congo que extienda la invitación.
Sobre el cambio climático, el presidente defendió que Brasil desempeñará un papel aún más central en la geopolítica mundial. “Ahora, con la cuestión climática, el potencial de negociación con Brasil ha aumentado mucho. Brasil tiene la mayor superficie de selva tropical”.
“No es pecado querer explotar de la forma más inteligente posible aquello que se puede transformar en riqueza para el país. Así es como vamos a tratar la cuestión de la Amazonia en nuestras relaciones internacionales”, añadió.
Con su viaje a China reprogramado para esta semana, el presidente habló de la reanudación de una relación fuerte entre los dos países, que fue ralentizada en los últimos años y que será rescatada. El país asiático es el mayor socio comercial de Brasil.
“Vamos a consolidar nuestra relación con China, voy a invitar al [presidente] Xi Jinping a venir a Brasil, a conocer Brasil en una reunión bilateral, para mostrarle los proyectos de interés. Lo que queremos es construir una asociación con los chinos … para que puedan invertir en cosas que no existen, una nueva carretera, ferrocarril, planta hidroeléctrica, algo que signifique algo nuevo para Brasil”, dijo Lula.
El jefe de Estado también citó la asociación estratégica con los países vecinos de América del Sur y volvió a defender el fortalecimiento de la relación regional. “No importa si Brasil es rico con vecinos pobres. Queremos que todos crezcan en igualdad de condiciones”, afirmó.
El presidente también habló de la importancia de reanudar las relaciones estratégicas con África, con una diplomacia ampliada y transferencia de ciencia y tecnología.
“La experiencia es que puedo hacer más cosas, más rápido, puedo producir más que en los otros mandatos, porque hay un proceso de aprendizaje de dos mandatos. Haremos más en cuatro años, proporcionalmente más, de lo que hicimos en ocho años”, insistió.
En relación a la marca de los 100 días de gobierno, Lula destacó el esfuerzo para poner en marcha programas sociales que ya habían sido adoptados por administraciones anteriores, pero que la obsesión para el próximo período es la generación de empleo.
“Si hacer política social en los primeros tres meses fue importante, ahora la obsesión es generar empleos”, dijo.
”Y generar empleo significa hacer crecer la economía. Para que la economía crezca, tenemos que tener dinero del presupuesto o financiación. Tenemos que utilizar la capacidad de recaudación de impuestos del Estado, la capacidad de financiación de los bancos públicos y la capacidad de construir PPP [Asociaciones Público Privadas], para que los empresarios y el gobierno puedan construir juntos las grandes obras que le faltan a Brasil. Por eso soy muy optimista.”
(Fuente: Agencia Brasil)
