El presidente Alberto Fernández dijo este viernes que su país no aceptará ninguna imposición que pueda poner en riesgo el crecimiento al negociar con acreedores extranjeros. El mandatario argentino hizo esas declaraciones desde un escenario frente a la Casa Rosada que compartió con los expresidentes José Mujica de Uruguay, Luiz Inácio Lula Da Silva de Brasil y Cristina Fernández de Kirchner, actual vicepresidenta de Argentina.
Los líderes regionales se reunieron en Buenos Aires para celebrar el Día Internacional de los Derechos Humanos y el 38º aniversario del retorno a la democracia en Argentina tras la dictadura militar de las Juntas (1976-1983).
El presidente Fernández destacó que la Argentina del ajuste es historia y prometió que en las negociaciones en curso con el Fondo Monetario Internacional (FMI) no se pondrá en peligro el crecimiento y el desarrollo social del país.
Fernández también recordó que el ex presidente Néstor Kirchner había pagado la totalidad de la deuda de Argentina con el FMI en 2005, pero el país volvió a pedir prestado bajo Mauricio Macri. No somos nosotros los que no queremos pagar nuestra deuda, no somos nosotros los que la tomamos, somos nosotros los que tenemos que hacernos cargo de la deuda que nos dejan, subrayó Fernández.
El Mandatario también dijo que “por esta democracia que vivimos hoy hubo miles de argentinos que dieron la vida, que fueron desaparecidos, sometidos a torturas, exiliados y que sufrieron encarcelamientos injustos”. Llamó a sus seguidores en Plaza de Mayo a cuidar la democracia en reivindicación de todos ellos.
Argentina es un símbolo de los derechos humanos en todo el mundo, prosiguió Fernández. También se comprometió a hacer todo lo necesario para que el último culpable rinda cuentas por la noche más negra que vivió la Argentina.
Fernández advirtió también que bajo la etiqueta de libertarios aparecen los xenófobos e insistió en que la democracia también consiste en no olvidar a los genocidas y a los que nos endeudaron.
El mandatario aseguró que su gobierno hará todo lo necesario para que cada argentino tenga un trabajo digno”, mientras que ningún pensionado tendrá que pagar su medicación. Destacó también la legalización de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) aprobada durante su presidencia.
La vicepresidenta Cristina Kirchner advirtió que el FMI ha condicionado la democracia argentina en las últimas décadas y ahora, tras el gobierno de Mauricio Macri, están de regreso al país para revisar las cuentas.
“Necesitamos que el Fondo nos ayude a recuperar los miles de millones de dólares que se han ido a los paraísos fiscales”, prosiguió la expresidenta, e instruyó a Alberto Fernández “para que cada dólar que encuentres en el exterior, de los que se los llevaron sin pagar impuestos, vaya a parar al FMI.
Cristina Kirchner señaló que Alberto Fernández encontró en números rojos el regreso del FMI a Argentina, con “un regalo de 44.000 millones de dólares.
Recuerdo cuando el presidente [Raúl] Alfonsín asumió hace 38 años en un día como hoy, y recibió a un país que había quintuplicado su deuda externa, sin reservas en el Banco Central, con disturbios militares a cada rato, con 30.000 desaparecidos y que en 1989 no pudo terminar su mandato”, prosiguió.
Mientras tanto, Lula aseguró que siempre estará al lado de Argentina y abogó por luchar por una democracia más justa e igualitaria y por recuperar el espíritu de la primera década de este siglo, de gobiernos democráticos y progresistas en América latina.
“Este es un día muy especial. Estamos conmemorando la recuperación de la democracia en Argentina; estamos conmemorando el día de los derechos humanos”, dijo el expresidente brasileño en “portuñol (una mezcla de español y portugués).
El expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica consideró que la democracia no es perfecta pero no hay mejor sistema y pidió al pueblo argentino que “la cuide”.