Durante este martes, el Papa Francisco abordó la crisis social que vive Chile desde hace más de un mes e hizo un llamado a la paz y al diálogo en Chile, Hong Kong, Francia, Nicaragua “y también España”.
Durante una conferencia de prensa con los periodistas que fueron acreditados en su vuelo de regreso de Tokio a Roma, el sumo pontífice fue consultado específicamente por la situación en Hong Kong, a lo que contestó: no se trata sólo de Hong Kong. Piense en Chile, piense en Francia, la democrática Francia: un año de chalecos amarillos. Piense en Nicaragua. Piense en otros países latinoamericanos que tienen problemas de este tipo y también en algunos países europeos.
En ese sentido, el Papa ahondó en el panorama de Latinoamérica, manifestando que la situación actual en América Latina se parece a la del 1974-1980, en Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Paraguay con (Alfredo) Stroessner, y creo también Bolivia (...). Una situación en llamas, pero no sé si es un problema que se le parece o es otro, manifestó.
Agregando que lo que está sucediendo en Chile me asusta, porque Chile está saliendo de un problema de abusos (sexuales de menores) que ha causado tanto sufrimiento y ahora hay un problema de este tipo que no entendemos bien. Pero está en llamas, como usted dice, y debemos buscar el diálogo y también el análisis.
En esa línea, Francisco se refirió a la gestión de los Gobiernos de la región, a los que tildó de débiles sin especificar cuáles. También hay gobiernos débiles, muy débiles, que no han logrado poner orden y paz, y por eso llegamos a esta situación, afirmó. En tanto, consultado por la mediación que solicitó el ex Presidente de Bolivia, Evo Morales, el Papa recordó que Venezuela también la ha solicitado y la Santa Sede siempre ha estado dispuesta. Hay una buena relación, realmente una buena relación, estamos ahí presentes para ayudar cuando es necesario.
Finalmente, Francisco reafirmó el llamado al diálogo de la Santa Sede. Yo respeto la paz y pido la paz para todos estos países que tienen problemas. Conviene relativizar las cosas y llamar al diálogo y la paz para que los problemas se resuelvan”, señaló.