La Organización de Estados Americanos (OEA), en base al informe preliminar de auditores, estableció que no puede validar los resultados de las elecciones del 20 de octubre, por lo que recomendó otro nuevo proceso electoral con nuevas autoridades electorales al haber encontrado graves irregularidades en el conteo, en las actas y en el resultado final.
“Teniendo en cuenta las proyecciones estadísticas, resulta posible que el candidato Morales haya quedado en primer lugar y el candidato Mesa en segundo. Sin embargo, resulta improbable estadísticamente que Morales haya obtenido el 10% de diferencia para evitar una segunda vuelta”, agrega.
En tanto, la empresa que realizó la auditoría informática al proceso electoral explicó las vulneraciones que sufrió el sistema. El gerente de Ethical Hacking, Álvaro Andrade, señaló que no se llevaron adelante los procedimientos adecuados, según recoge la publicación boliviana Página Siete. “Se violó la integridad de la base de datos, del sofware de las elecciones, los procedimientos, se dieron inconsistencias, más allá de lo que pudo pasar, del cambio de actas que se han reportado estos días, nuestra función como empresa de seguridad de auditores es decir todo lo que se encontró, y mucho de lo que se encontró sustenta que el proceso electoral está viciado de nulidad”, afirmó el gerente de Ethical Hacking.
Las conclusiones preliminares de la OEA son las siguientes:
• Se encontraron irregularidades -desde muy graves hasta indicativas- en los cuatro elementos revisados (tecnología, cadena de custodia, integridad de las actas y proyecciones estadísticas). Esto lleva al equipo técnico auditor a cuestionar la integridad de los resultados de la elección del 20 de octubre pasado.
• En el componente informático se descubrieron fallas graves de seguridad en los sistemas tanto TREP como del cómputo final. Además, se descubrió una clara manipulación del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) que afectó los resultados del cómputo final.
• La existencia de 1.575 actas TREP en el cómputo final, corresponde a un aproximado de 350 mil votos. El margen de victoria en primera vuelta es menor a 40 mil votos. Por lo tanto, una irregularidad de estas dimensiones es determinante para el resultado. Por estas razones el equipo auditor no puede validar una victoria en primera vuelta.
• Las manipulaciones al sistema informático son de tal magnitud que deben ser profundamente investigadas por parte del Estado boliviano para llegar al fondo y deslindar las responsabilidades de este caso grave.
• La existencia de actas físicas con alteraciones y firmas falsificadas también impacta la integridad del cómputo oficial.
• De 176 actas analizadas de la muestra que habían sido escrutadas en Argentina, el 38,07% presentan inconsistencias con el número de ciudadanos que sufragaron. Es decir, las actas reflejan un número mayor de votos que el total en las listas índice.
• Teniendo en cuenta las proyecciones estadísticas, resulta posible que el candidato Morales haya quedado en primer lugar y el candidato Mesa en segundo. Sin embargo, resulta improbable estadísticamente que Morales haya obtenido el 10% de diferencia para evitar una segunda vuelta.
• Los técnicos de la OEA contaron con la necesaria información y accesos para poder realizar su trabajo.
• El equipo auditor no puede validar los resultados de la presente elección, por lo que se recomienda otro proceso electoral. Cualquier futuro proceso deberá contar con nuevas autoridades electorales para poder llevar a cabo comicios confiables.
• Finalmente, el equipo de auditores seguirá procesando información y las más de 250 denuncias recibidas sobre el proceso electoral de cara al informe final, el cual contendrá una serie de recomendaciones. Sin embargo, los hallazgos preliminares son contundentes.
En el informe de la auditoría informática de Ethical Hacking se incluye que está que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) “desanuló” actas de cómputo de la ciudad de Tarija. Según el gerente de la empresa estas irregularidades beneficiaron al partido del presidente Evo Morales.
También se identificó que un servidor operó sin permisos. Los códigos fuentes para operar ese servidor estaban en poder de Neotec, la empresa responsable del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares.
Se detectó una cantidad de tráfico excesivo a las 19:30 desde una dirección IP desconocida y un servidor no identificado. Se presume que alrededor de 35.000 actas de cómputo fueron modificadas.