China suspenderá aranceles adicionales a vehículos fabricados en Estados Unidos y partes de autos por tres meses a partir del 1 de enero de 2019, dijo el viernes el Ministerio de Finanzas, en medio de una tregua en la guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo.
El Ministerio de Finanzas también dijo en un comunicado en su sitio web que espera que China y Estados Unidos puedan acelerar las negociaciones para retirar todos los aranceles adicionales sobre los bienes del otro país.
“Esta es una buena señal de que China y Estados Unidos están encaminados a resolver la guerra comercial”, dijo Wang Cun, director de la comisión de importaciones de la Asociación de Comerciantes de Automóviles de China.
Joe Hinrichs, presidente de la unidad de las Américas de Ford Motor Co, también acogió con agrado el anuncio de China, señalando que la compañía exportó unos 50.000 vehículos construidos en Estados Unidos al gigante asiático en 2017.
“Como líder de exportaciones de vehículos de Estados Unidos, estamos muy satisfechos con el anuncio de China”, sostuvo Hinrichs. “Aplaudimos la decisión de ambos gobiernos de trabajar juntos para reducir las barreras comerciales y abrir los mercados”.
Las exportaciones de automóviles entre los países son relativamente pequeñas. China exportó 53.300 vehículos a Estados Unidos el año pasado e importó 280.208 unidades manufacturadas en ese país, según datos del Centro de Investigación y Tecnología Automotriz de China, un grupo de estudio afiliado al gobierno.
En contraste, en los primeros 11 meses del año, China produjo 25,3 millones de autos, un 2,6% menos que en el mismo período del año pasado, de acuerdo a cifras de la industria.
El anuncio sobre los automóviles se da tras la primera compra importante de China de soja estadounidense desde la reunión entre los mandatarios Donald Trump y Xi Jinping el 1 de diciembre en Argentina. Estas decisiones son señales de que la guerra comercial entre los países puede estar empezando a ceder.
En Argentina, Trump y Xi acordaron una tregua que retrasó el planeado aumento de los aranceles de Estados Unidos desde el 1 de enero a productos chinos valorados en 200.000 millones de dólares mientras las partes negocian un acuerdo comercial.
Beijing suspenderá aranceles de 25% sobre 144 vehículos y piezas de automóviles estadounidenses y tarifas de 5% sobre 67 ítems automotores.