El Fondo Monetario Internacional recomendó al Gobierno chino liderar la defensa del libre comercio y del multilateralismo global en medio de las crecientes tensiones comerciales con Estados Unidos.
En el actual contexto, China debería jugar un rol de liderazgo para demostrar que es un defensor del libre comercio por su propio interés, señaló en una rueda de prensa en Washington el jefe de la misión del FMI en China, James Daniel.
El directivo del Fondo felicitó al Gobierno del presidente Xi Jinping por su firme compromiso con el comercio global, después de que el Ejecutivo chino haya apuntado en los últimos meses que trabajará para importar más productos que sean competitivos y necesarios.
La participación creciente de China en el comercio internacional y la inversión, a medida que su economía de rápido crecimiento se integra más con el resto del mundo, subraya la importancia que China defienda el sistema de comercio internacional, sentenció el jefe de la misión en el país asiático del FMI.
En los últimos meses, China ha levantado las restricciones de su sector automovilístico, ha abierto su mercado a la carne de vacuno de Francia e Irlanda, y ha anunciado una reducción de los sectores restringidos a la inversión o actividad de firmas foráneas, entre otras cuestiones.
El paquete recientemente anunciado de políticas de apertura del Gobierno chino está en la dirección correcta y le instamos a acelerar las reformas en esta área, consideró Daniel.
En su última actualización de perspectivas económicas globales en julio, el FMI proyectó un crecimiento de 6.6% para este año y del 6.4% para el próximo en China, sin cambios respecto a lo calculado en abril.
Por otro lado FMI alertó que la prolongación de las actuales tensiones comerciales desencadenadas por el Gobierno del presidente de EE.UU., Donald Trump, con China podría restar cinco décimas al Producto Bruto Interno (PBI) mundial para el 2020.
Además de congratular al Ejecutivo chino por las medidas aperturistas, Daniel aplaudió que desde Beijing se hayan impulsado reformas para reducir los riesgos del sistema financiero e intensificado los esfuerzos contra la contaminación.
El FMI, sin embargo, urgió al Gobierno chino a incrementar el gasto social y a reformar las pensiones, unas modificaciones estructurales decisivas para apoyar el consumo y reducir la desigualdad.