Entre los cariñosos gestos de cordialidad, los elogios y regalos simbólicos, probablemente una de las imágenes que más llamó la atención de la visita del Mandatario francés, Emmanuel Macron, a Washington la semana pasada, fue la de él junto al presidente de EE.UU, Donald Trump, plantando un árbol en los jardines de la Casablanca.
Acompañados por las primeras damas, Briggite Macron y Melania Trump, ambos jefes de Estado plantaron un roble proveniente del bosque del norte de Francia en el que unos 2.000 marines estadounidenses murieron durante la Primera Guerra Mundial, como parte de un gesto simbólico de los lazos que nos unen, según dijo en aquel momento el Mandatario europeo.
Pero luego de unos días desde aquel suceso, el árbol desapareció misteriosamente de los jardines de la casa de gobierno estadounidense, quedando solo una mancha amarilla en el pasto, según registró en una imagen un fotógrafo de Reuters.
¿Dónde había quedado la planta? Las interrogantes y rumores comenzaban a circular en redes sociales, por lo que el embajador de Francia en Estados Unidos, Gérard Araud, explicó lo ocurrido a través de su cuenta de Twitter.
Está en cuarentena, algo obligatorio para cualquier organismo vivo importado a Estados Unidos. Será replantado después, escribió. Por su parte la radio francesa Franceinfo ha señalado que el portal especializado en jardinería, Gerbaud.com, establece que el mejor momento para trasplantar este tipo de roble es en otoño, especulando que probablemente el árbol vuelva en octubre.