El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se reunió este martes con el representante del Vaticano en el país, en nuevos contactos para tratar de reanudar el suspendido diálogo gobierno-oposición.
Al referirse al encuentro entre Maduro y el nuncio apostólico Aldo Giordano, el ex candidato presidencial opositor Henrique Capriles calificó como “una estafa” el proceso de diálogo emprendido con la mediación del Vaticano y la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) en busca de soluciones a la grave crisis política y económica venezolana.
El mandatario populista recibió a Giordano en el palacio presidencial de Miraflores, un día después de conversar allí con el exjefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, integrante de la misión de la Unasur junto con los expresidentes Martín Torrijos (Panamá) y Leonel Fernández (República Dominicana).
Las citas, según un reporte de la televisora estatal VTV, forman parte “del esfuerzo por parte del Gobierno Nacional para reactivar el diálogo”. No trascendieron mayores detalles. Pero Capriles advirtió que los líderes de oposición no serán “tontitos útiles”.
“Cada vez que hay una situación de crisis y señalamientos graves contra el gobierno, Maduro llama al diálogo (...). Espero que el Vaticano tenga una posición firme” , dijo el dirigente a través de la red social Periscope.
Así, Capriles aludió a las sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos contra el vicepresidente Tareck El Aissami por supuestos nexos con el narcotráfico.
Las conversaciones de la mesa de diálogo, instalada en octubre pasado, fueron congeladas el 6 de diciembre por la oposición, acusando al gobierno de incumplir los acuerdos pactados.
El martes último, el Vaticano anunció la disposición del papa Francisco a una posible reunión en la Santa Sede con delegados del gobierno de Maduro y la oposición, a fin de reanudar contactos. “Estamos listos”, expresó entonces Giordano.