La politóloga guatemalteca de visita en Argentina, Gloria Alvarez quien revolucionó las redes sociales tras su exposición en el Parlamento Iberoamericano de la Juventud, en Zaragoza, se refirió a la íntima relación que mantienen el populismo con el narcotráfico y del empobrecimiento que sufren los países de la región.
En un mensaje centrado en esta tendencia, que se ve sobre todo en algunos países latinoamericanos, como Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, Alvarez señaló que esas naciones -y Cuba- siguieron a la perfección un manual que indica los pasos a seguir para perpetuarse en el poder.
Se instaló con fuerza el manual del populismo en América Latina. El manual sigue ciertos pasos. Podemos ver una agenda: se inserta odio en la sociedad, se elimina a toda la oposición del legislativo, necesitas tener jueces de tu lado, empezar a restringir libertades económicas. Además se prohíbe a la gente adquirir cosas del extranjero, hay restricciones a la libertad de expresión. Las reformas constitucionales terminan siendo la cúspide de ese manual, explicó Alvarez en una entrevista con InfobaeTV.
Consultada acerca de la relación entre el populismo y el narcotráfico, la politóloga guatemalteca señaló que el narco necesita al populismo.
El narco necesita al populismo. Se necesitan uno al otro, expresó. El narcotráfico es una entrada de dinero super-eficiente para mantenerlo, como en el caso de Guatemala, en donde en las campañas políticas no se sabe cuánto dinero entra del narco. Es un problema en el que todos quieren cerrar los ojitos. Este dinero, obviamente, financia que siga habiendo corrupción e impunidad, indicó.
La politóloga guatemalteca señaló también que el odio y el discurso polarizante eran otros de los males que sufren las sociedades regionales. La venita del odio levanta pasiones en América Latina, porque venimos de un pasado donde evidentemente había choque, dijo, y añadió que actualmente ”el discurso polarizante (está) en todos los países y se da en todas las ideologías.
Respecto al manual que siguen los países populistas, Alvarez se refirió a una problemática común en la mayoría de los países de América Latina: la libertad de expresión. En tal sentido señaló que en Cuba, Venezuela y Ecuador existe un discurso polarizante.
La mayoría de la gente me dice: 'Pudiste sintetizar un sentimiento que yo no podía describir', comenta la mujer que es sensación en las redes sociales. Asimismo señaló que el liberalismo enfrenta un reto en el siglo XXI y que en ese sentido es que ella intenta comunicar con un lenguaje sencillo los conceptos ideológicos. Creo que la persona tiene que adquirir dignidad, un respeto por sí misma, un sentido de que el mundo está lleno de oportunidades. En América Latina, nos victimizamos, buscamos quién es el culpable de los males, analiza.
Al ser consultada sobre la realidad de los países de la región, Alvarez describió algunos de ellos respecto al capítulo del manual demagógico en el que estén. Respecto a la Argentina, la ubica en un lugar intermedio con relación a los principales países que lo padecen.
Los argentinos pueden identificar medidas en ese sentido. Algunas que tratan de tapar el sol con un dedo, como Fútbol Para Todos. Tú ya no puedes comercializar productos del extranjero, o problemas con la soja. Avanzó en ese manual, pero otros lo completaron, como Cuba, Venezuela y Nicaragua. La Argentina completó la mitad del manual. En cuanto a Brasil, puntualizó que se encuentra en una instancia similar a la de la Argentina, aunque aclaró que al Partido de los Trabajadores gobernante tratar de controlarlo todo le va a costar un poco más porque es un país muy grande.
El objetivo final del populismo es enriquecerse sin tomar riesgos. Pero los muertos los estamos poniendo nosotros, dice lamentándose por los crímenes e injusticias que se viven a diario en los países de América Central.
Para Gloria Alvarez, el populismo es enemigo de la educación. Se basa en obsesionarte con el objeto material para engañarte. En relación con el papel de la mujer en la política, comentó que según su perspectiva quienes tienen relevancia en la vida de gestión de la región no abogan por la libertad. Me parece fantástico que estén abriendo su espacio en un mundo que presenta retos. La mayoría se va por el lado de un socialismo maternal. Veo pocas que aboguen por la libertad.
Respecto a las mandatarias de la región, dijo que la presidente de Chile, Michelle Bachelet, ha mantenido un respeto a cierta institucionalidad. En su socialismo podemos ver un respeto por la institucionalidad, que no veo en Cristina Fernández de Kirchner. Dilma (Rousseff) coquetea con una idea de volverse más como Cristina.
El populismo se concentra en la figura de la persona. Si estás en contra de la persona, sos un 'vendepatria'. Necesitan esa idolatría de la persona. Es la personificación del Gobierno”, concluyó Alvarez.