La noticia, como era de esperar, conmocionó a Galicia, las Islas Falkland y la industria de pesca en el Atlántico Sur: el gobierno de las Islas decidió suspender el inicio de la segunda temporada de captura del calamar Loligo, por razones de conservación. El parte oficial de un 16 de agosto dijo que la decisión fue tomada como medida de conservación; permitir que la captura prosiguiera cuando la biomasa está en un mínimo sin precedentes significaría serios riesgo de largo plazo a la población del calamar Loligo, el cual a su vez impactará negativamente en la industria por muchos años por delante en el futuro.