Los años dorados en los que el Partido de los Trabajadores del Brasil era un referente internacional para la izquierda de toda América Latina parecen ahora soterrados bajo la victoria de Jair Bolsonaro.
Doce de los 27 gobernadores elegidos en las elecciones brasileñas, incluyendo dos de los ricos estados de Sao Paulo y Río de Janeiro, aprovecharon la ola populista que encumbró a Jair Bolsonaro para conseguir unas victorias que hace unos meses parecían improbables.
Jair Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar brasileña, ha sido elegido como el nuevo presidente de la mayor potencia de América Latina tras una de las campañas más divididas y tensas de la historia del país obteniendo el 55 % de los votos tras el escrutinio de más del 99% de las urnas.