Las elecciones no se decretan u ordenan, se convocan. Y es que el régimen venezolano, con este nuevo disparate, no hace sino más que desvelar el asesinato, no sólo de personas que piensan distinto de maneras tan atroces como ejecutándolos extrajudicialmente –con un ejército completo– para callar y escarmentar, sino también el asesinato de los principios democráticos y republicanos fundamentales mientras pisotean la constitución del país.
Se profundiza el resquebrajamiento del chavismo. Primero fueron algunos funcionarios históricos, que salieron del gobierno denunciando que el presidente Nicolás Maduro y sus lugartenientes están traicionando la revolución.
El descontento generalizado con el chavismo y el presidente venezolano Nicolás Maduro se ha visto expresado en las últimas encuestas de opinión pública que indican que el apoyo al régimen se ha desplomado en veinte puntos llegando al 37%.