Las islas Georgia del Sur, junto a las South Sándwich son un Territorio Británico de Ultramar, además de Zona de Protección Marina, MPA, y a pesar de lo remoto de su ubicación, a unos 4,000 kilómetros del continente blanco y 1,700 del continente sudamericano en el extremo sur del Atlántico Sur, no están exentas de una larga e interesante historia, como también de un presente lleno de sorpresas.
Fueron recorridas por primera vez por el navegante y explorador inglés James Cook en enero de 1775, a bordo del Resolution, para luego transformarse por siglos en un coto de caza industrial de fauna marina y de cetáceos hasta su casi exterminación. Pero todo eso pertenece al pasado, la caza de ballenas terminó hace décadas y hoy en día las islas ya no más dependientes de las Falklands viven de las licencias de pesca, y del turismo, además de bases permanentes de exploración científica.
Y Georgia del Sur tiene asimismo sus propias atracciones, entre ellas la tumba, (a expreso pedido suyo), del gran explorador polar británico Sir Ernest Shackleton, enamorado de los paisajes antárticos. Las islas son también la ruta de los grandes desprendimientos de témpanos antárticos, fruto del cambio climático y en el territorio insular de la eliminación de especies invasivas, como roedores, insectos y de semillas.
Y justamente como parte de la tarea de inspección para evitar esa reintroducción invasiva están las únicas dos funcionarias postales de la isla que además deben atender a los turistas interesados en algunos recuerdos y el envío de cartas con hermosos sellos de una oficina de correo tan remota, a familiares y amigos.
Ellas son Sarah Devlin y Laura Ling. Sarah quedó fascinada de la isla Georgia del Sur durante la concurrencia a un pub en Irlanda del Norte donde escuchó cuentos e historias de islas remotas en el Atlántico Sur, en los recreos de descanso mientras preparaba su tesis de doctorado. En cuanto se presentó una oportunidad para viajar y emplearse en el Atlántico Sur, sur la tomó y terminó en la oficina de correos de Georgia del Sur.
Pero como se dijo más arriba su tarea no se limita a atender la oficina postal. Se trata de algo bastante más duro, el control de bioseguridad de todo lo que está destinado al Correo, especialmente cuando llega la patrulla Pharos. No estamos hablando solo de roedores o insectos, también involucra el control de semillas que pueden estar en ropas o calzados...
Georgia del Sur cuenta con dos tiendas, una en el museo local que es administrado por el Fondo Patrimonial de la Isla (South Georgia Heritage Trust) y la otra, la Oficina de Correos, administrada por el gobierno de la Isla. Atienden a los turistas de cruceros y de yates que llegan todos los veranos tras filatelia y recuerdos.
Y como destaca Sarah, es un lugar deslumbrante para visitar, y para trabajar, no hay calles, no hay pueblos y mucho aire puro, y rodeado de una increíble fauna de aves y mamíferos marinos.
Los residentes permanentes en la isla viven en King Edward Point, a poca distancia de Grytviken alguna vez capital y donde estaba centrada la industria de caza y procesamiento de ballenas. En King Edward Point, vive personal del gobierno e investigadores del British Antarctic Survey, BAS.
La historia indica que la Oficina Postal de Georgia del Sur se estableció en diciembre de 1909 por John Innes Wilson quien era el juez residente, forense, a cargo de la oficina de registros y del correo. El primer saco de encomiendas que enviara a las Islas Falkland fue en el pesquero Cachalot el 23 de diciembre de 1909. Georgia del Sur no cuenta con pista alguna de aterrizaje y toda comunicación es por mar y el reparto de cartas y paquetes a los balleneros se hacía en bote a remo o caminata.
La idea de emitir sellos de la isla, fue sugerida por primera vez en 1911, pero no fue hasta 1963, tras el Tratado Antártico que cristalizara y Georgia del Sur contó con sellos propios. Un imán para los coleccionistas filatélicos, al igual que las chapitas alusivas a la isla y su fauna.
Para Sarah y Laura, (en su segundo semestre), la aventura empezó a fines de setiembre con un contrato de seis meses. Para Sarah ha sido su primera experiencia,... junto a su pasión el violoncelo. Lo trajo desde Belfast, y toca desde hace 22 años. Para mí es muy expresivo y sedante, me trae a tierra y me conecta fácilmente con otra gente. De donde vengo hay mucha música e instrumentos, y lo traje aún cuando en el puente aéreo tuve que conseguirle un asiento propio para viajar...
Por tanto promete ser un verano pleno de música para turistas y para la propia fauna de Georgia del Sur.
- Algunos datos adicionales de las Georgia y Sándwich del Sur, la población es mínima aún en meses estivales; en 2012 se declaró la MPA en torno a las islas con un área de un millón y cuarto de kilómetros cuadrados; en 2018 se declaró a Georgia del Sur libre de roedores que asolaban la fauna autóctona; en 2013, se eliminó un rodeo de 3,500 renos introducido por los noruegos en plena época ballenera, pues se trataba de una especie invasiva; hay una patrulla de protección pesquera y de conectividad, Pharos y también HMS Forth de la Royal Navy que vela por los intereses del Territorio Británico de Ultramar. Alison Blake CMG, Gobernadora de las Islas Falkland es también Comisionada para las Islas de Georgia del Sur y Sándwich del Sur.