La administración argentina del presidente Javier Milei recibirá préstamos por valor de 3.800 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según se informó durante el fin de semana. Estos fondos serán destinados a diversos proyectos, subsidios energéticos y planes sociales, se explicó.
Por un lado, 2.400 millones de dólares se destinarán este año al sector público, mientras que 1.400 millones que se desembolsarán en los próximos dos años serán para diversos proyectos privados de agronegocios, infraestructura, energía y minería, entre ellos tres de litio, escribió este domingo el CEO del BID, Ilan Goldfajn, en el Financial Times, en el que destacó los logros económicos de la Argentina de Milei.
El brasileño-israelí Goldfajn también destacó la importancia del trabajo conjunto entre los sectores público y privado para mejorar las condiciones de inversión. Goldfajn sostuvo que para dejar atrás las recurrentes crisis del país se requiere un sector público más eficiente y un sector privado dinámico que genere oportunidades y sirva como motor de crecimiento.
También elogió al Gobierno de Milei por haber dado pasos decisivos en esta dirección: en sólo siete meses ha logrado avances notables en el restablecimiento del tan necesario equilibrio fiscal, pasando de un déficit del 2,9% del PIB a finales de 2023 a un superávit del 1,5% a finales de agosto de este año.
Goldfajn consideró necesario continuar en esta línea y profundizar en la optimización del gasto público. Es de suma importancia seguir mejorando la eficiencia del gasto y reorientar los recursos para ayudar mejor a los argentinos más vulnerables, subrayó al tiempo que insistió en que el BID está “trabajando estrechamente con el Gobierno para mejorar la eficiencia del gasto y fortalecer la protección social”, que sin embargo es sólo una “parte de la historia” para mejorar la economía argentina.
Una transformación duradera dependería de que el sector privado creara empleo y el sector público proporcionara una regulación adecuadaa y una sólida protección social para crear un ciclo de estabilidad y crecimiento sostenido.
Goldfajn también destacó la desregulación bajo Milei, que junto con un clima empresarial favorable, permitiría un mayor dinamismo.