Los principales sindicatos de Argentina insistieron este miércoles, durante las manifestaciones por el Día del Trabajo, en que no están en duda los planes para la huelga general del 9 de mayo contra las reformas económicas del presidente Javier Milei, que están afectando al poder adquisitivo de la población.
El líder sindical de los trabajadores de la sanidad, Héctor Daer, que copreside la Confederación General del Trabajo (CGT), también explicó que vamos a seguir adelante con el plan de lucha que venimos desarrollando. Cuando se anunció la medida, Argentina estaba mal y ahora está peor.
Tenemos una agenda muy clara de reclamos, que tienen que ver con la situación social, con las decisiones que se tomaron a lo largo de estos meses de gobierno, decisiones que tuvieron que ver con un ajuste brutal sobre los sectores más vulnerables, señaló también Daer. No vamos a ceder ni un ápice de todos los derechos que hemos conquistado a lo largo de la historia, continuó.
Su co titular de la CGT Pablo Moyano también se comprometió a no mantener ninguna negociación con la coalición oficialista de La Libertad Avanza de Milei y la ya desaparecida Juntos por el Cambio del ex presidente Mauricio Macri. Los 33 senadores peronistas van a votar en contra de la Ley de Bases, subrayó sobre el megaproyecto de reforma de Milei aprobado por la Cámara Baja esta semana.
Moyano también dijo que Milei tenía razón cuando afirmaba que los salarios habían superado a la inflación: sus salarios sí... los de los trabajadores no.
Hoy es un día horrible, triste y amargo. No se dan cuenta del daño que le están haciendo al pueblo argentino con lo que se votó ayer. No hay un solo beneficio en la Ley de Bases; es para los empresarios. Y para que el Senado la apruebe, el Gobierno está extorsionando a los gobernadores a través de la obra pública, argumentó Moyano.
También participó de las manifestaciones del miércoles el gobernador bonaerense, Axel Kicillof. Estamos aquí para apoyar la unidad del movimiento obrero en un momento muy difícil para nuestro país, dijo. Kicillof también habló de un nuevo ataque contra los derechos de los trabajadores, que busca llevarnos hacia un modelo de país primario, agroexportador y sin soberanía.
Ayer pasó algo muy grave, por los métodos y, sobre todo, por el contenido: no es nada nuevo relacionado con la escuela austríaca, sino una reforma laboral que apunta al salario y a los derechos, subrayó también Kicillof.
El impacto de las políticas de Milei ya se está sintiendo en la industria nacional y en las pymes bonaerenses: el éxito de las políticas del gobierno nacional implica la derrota de los trabajadores, de los jubilados y de las grandes mayorías populares, argumentó el ex ministro de Economía.
El destino de la provincia de Buenos Aires está atado al destino del movimiento obrero y de la industria nacional, insistió Kicillof, quien no será invitado a Córdoba el 25 de mayo para la firma del Pacto de Mayo que Milei ha convocado con los gobernadores provinciales para poner en marcha el país.
Dudo que quiera venir si está a favor del déficit fiscal, dijo Milei en una entrevista radial sobre Kicillof. Los que no apoyen el acuerdo van a quedar afuera, insistió el mandatario.