El enclave paraguayo de Ciudad del Este, capital del departamento de Alto Paraná, fronterizo con Argentina y Brasil, ha sido declarado en emergencia debido a una creciente ola de inseguridad. El alcalde Miguel Prieto habló de una situación insostenible con muchos robos que sólo vemos en las películas. La medida estará en vigor 30 días, pero podría prorrogarse ante hechos delictivos reiterados.
Desde principios de año se han originado varios hechos delictivos con consecuencias desastrosas para el patrimonio y la integridad física de los ciudadanos, señaló en su resolución el gobernador de Alto Paraná, César Landy Torres. Existe la necesidad y urgencia de contar con herramientas ágiles para enfrentar la situación y así poder activar los mecanismos de reacción del Estado, agregó.
El gobernador también dijo en una entrevista radiofónica que unos 200 agentes del orden serían enviados desde Asunción tras mantener conversaciones con el ministro del Interior, Enrique Riera.
Para el viernes [día feriado en Paraguay] está prevista una manifestación en Ciudad del Este para protestar contra la ola de crímenes, mientras que el lunes podrían organizarse otros actos.
Lo que viene es una ola de asaltos que nunca vi desde que tengo conocimiento en mi ciudad, dijo Prieto en una entrevista televisiva.
La corrupción generalizada en varios niveles del gobierno, el sector privado y el ejército, la falta de un sistema de registro adecuado y la influencia de poderosas organizaciones criminales, predominantemente de Brasil, están detrás de esta nueva serie de sucesos, según la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Internacional, que también denunció que las operaciones de contrabando entre países vecinos han ido en aumento y Paraguay es una zona de tránsito.
A fines de 2023, el Ministerio Público llevó a cabo la denominada operación Dakovo, que contó con personal de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), la Policía Federal de Brasil y el Departamento de Seguridad Interior de los Estados Unidos, que permitió la incautación de armas y dinero en efectivo, producto del comercio ilegal entre Paraguay y Brasil.