La ministra de Relaciones Exteriores de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, admitió que su país vendió armamento inútil de fabricación rusa a Estados Unidos a cambio de armas operativas para librar la guerra del país sudamericano contra las bandas de narcotraficantes. La medida fue adoptada a pesar del consejo en contra de Moscú, según se explicó.
”Precisamente, una de las formas de cooperar es que los equipos que no están operativos puedan ser entregados (a Estados Unidos), a cambio de recibir equipos que sí están operativos y que responden a las necesidades actuales de seguridad de Ecuador, dijo Sommerfeld en una entrevista televisiva.
También señaló que al embajador ruso Vladimir Sprinchan se le había dicho que el gobierno del presidente Daniel Noboa tenía el derecho de realizar tal transacción porque no viola ninguna regulación y no es ilegal. A principios de este mes, Sprinchan había argumentado que los estadounidenses no necesitan estos equipos, más aún cuando se los llama chatarra. También dijo que Rusia interpretaría esa medida como un paso inamistoso.
Washington ya ha aportado 20.000 chalecos antibalas y material de seguridad por valor de un millón de dólares, incluidas ambulancias y vehículos de apoyo logístico. Además, una delegación de Washington llegó a Quito para analizar una mayor cooperación.
La misión estadounidense está encabezada por el asesor presidencial para las Américas Christopher Dodd, y cuenta también con la jefa del Comando Sur, la general Laura Richardson, así como con otros funcionarios. El viaje fue considerado como una señal política poderosa y concreta” de apoyo a la situación en Ecuador, dijo Sommerfeld, quien insistió en que Ecuador tiene todo el derecho legal de recibir la cooperación de EE.UU. y de otros países en materia de seguridad.
A la comitiva visitante se le pidió un mayor acceso al mercado estadounidense para los productos y servicios ecuatorianos, así como la atracción de inversiones y financiación, lo que generaría más empleo.