Los jugadores de la selección uruguaya sub-20, campeona del mundo en fútbol, fueron recibidos este lunes como héroes en Montevideo, donde el público se echó a la calle para animar al autobús que recorría la capital sudamericana por la Rambla, a lo largo de la Avenida 18 de Julio, camino del estadio Centenario.
Mientras miles de aficionados coreaban Dale campeón, el emblemático futbolista Luis Suárez subió al autobús y se fotografió con los jugadores, sumándose así a la celebración.
Es una fiesta, que la gente lo reconozca es increíble. Ya he llorado bastante, ahora estoy disfrutando. Estoy muy emocionado de tener a toda esta gente festejando, dijo el capitán del equipo, Fabricio Díaz, al llegar al Centenario.
Luciano Rodríguez, autor del gol de la victoria ante Italia el pasado domingo en La Plata (Argentina), dijo que es para todo el pueblo uruguayo durante una rueda de prensa en el aeropuerto internacional de Carrasco antes de subir al autobús celeste.
Este es un grupo impresionante, estamos viviendo un sueño, dijo Rodríguez, que regresó de una suspensión de dos partidos tras su tarjeta roja en el encuentro contra Gambia, para marcar la diferencia contra Italia. Por suerte la metí y pudimos ganar el Mundial, que era lo más importante, afirmó.
Ahora somos campeones del mundo y toca disfrutarlo con toda la gente, insistió. No descartó un nuevo tatuaje para inmortalizar en su piel la palabra resiliencia, que fue muy importante porque me ayudó a creer en todo momento.