MercoPress. South Atlantic News Agency
Los argentinos “lloran” por los salarios muertos frente a la inflación
Una lápida falsa y coronas de flores se unieron a la procesión hacia la Plaza de Mayo para despedir los ingresos del pueblo Organizaciones sociales argentinas escenificaron un funeral en la Plaza de Mayo de Buenos Aires, frente a la Casa Rosada, para llorar el salario mínimo que, según afirman, ha “fallecido” bajo los efectos de la inflación y los recientes ajustes de las tarifas de los servicios públicos.
“Vital, Mínimo S. q.e.p.d” rezaba la falsa lápida llevada en procesión hasta la emblemática plaza. “Familiares y trabajadores de todo el país anunciamos, con profunda tristeza, el fallecimiento de S.M.V.M. Sus restos serán velados en Avenida de Mayo 395. Extendemos la participación a quienes quieran acercarse y acompañar en este doloroso momento de nuestra historia”, continuaba el cartel.
El mensaje fue colocado en la caja de madera, adornada con flores, que llevaba el “cuerpo” del salario, que fue “enterrado” en Plata de Mayo.
La central obrera exige al gobierno “medidas que permitan la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores”. Además, marcharon contra la remarcación de precios.
Las agrupaciones sociales que impulsaron la puesta en escena destacaron que la canasta básica de alimentos asciende a más de AR$ 110.000 (alrededor de US$ 380 al cambio no oficial).
También llevaron coronas, flores y un ataúd a lo largo de la Avenida de Mayo mientras mostraban una pancarta que anunciaba “el salario ha muerto”.
Un comerciante en las calles donde se realizó la manifestación dijo a los periodistas que siempre que se realizan esas protestas “se reduce el trabajo en un 70%” porque los días laborables es cuando ocurre todo. “El sábado abro pero no es suficiente”.
Miriam Rodríguez, participante de la marcha, dijo a MDZ que “los precios nos superan a todos. Ya no alcanza para la canasta básica, para poder mantenerse”.
Otro participante, Maximiliano Matia, sugirió reducir la jornada laboral para crear más puestos de trabajo para los desempleados.
Con el fin de los subsidios a la energía, la creciente inflación y la crisis económica general, se espera que las manifestaciones aumenten con el tiempo.
