El Gobierno de Argentina anunció este jueves un nuevo entendimiento con Bolivia para asegurar un suministro diario de gas de 14 millones de metros cúbicos y un compromiso para que, en el futuro, Argentina tenga prioridad para importar cualquier excedente de producción.
Las negociaciones habían estado en marcha durante la semana. El visto bueno de Brasil era necesario porque ese país también tenía un acuerdo de importación con Bolivia y los montos que ahora se otorgan a Argentina deben provenir de ese stock.
El presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, explicó que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) venderá los mismos volúmenes de gas que entregó al mercado argentino el año pasado: 14 millones de metros cúbicos (MMm3) diarios para el invierno y 10 MMm3/día para el resto del año. Los volúmenes pueden aumentar, dependiendo de una mayor producción boliviana.
El anuncio concluyó meses de negociaciones y se hizo, como estaba previsto, durante el viaje de Arce a Buenos Aires para reunirse con su homólogo argentino, Alberto Fernández, quien le agradeció su esfuerzo para llegar al nuevo acuerdo.
Habrá dos precios: uno de emergencia a razón de US$ 9 por millón de BTU (unidad de medida de gas) para los primeros 10 millones de metros cúbicos y de US$ 18 por millón de BTU para el resto del suministro.
La agenda energética de la Casa Rosada busca asegurar suficiente gas de manera de no aplicar recortes en las actividades industriales para garantizar la calefacción de los hogares del norte argentino.
La declaración conjunta significa avanzar en la consolidación de la agenda energética bilateral, lo que implica, entre otros puntos, garantizar el suministro de gas en volúmenes significativos para la actual administración.
Argentina y Bolivia coincidieron en “la importancia de realizar acciones concurrentes para que el Contrato de Compraventa de Gas Natural entre YPFB e IEASA refleje un nuevo régimen garantizado de entrega de 14 MMmcd (millones de metros cúbicos por día) y priorizando, según disponibilidad, volúmenes en el período invernal, y la cesación de derechos y obligaciones antes de 2025.”
Los dos gobiernos también “acordaron avanzar en el análisis de oportunidades de inversión de YPFB en Vaca Muerta y trabajar de manera conjunta en la identificación de alternativas para el abastecimiento de hidrocarburos líquidos en pos de la seguridad energética de ambos Estados”.