La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dijo el viernes que estaba preocupada tras la decisión del jueves de la Corte Constitucional de Perú de restituir un indulto al expresidente Alberto Fujimori, quien está a punto de salir de la cárcel, luego de ser condenado a 25 años por crímenes de lesa humanidad.
La CIDH insistió en que la liberación de Fujimori afectaría los derechos de las víctimas.
El tribunal restableció este jueves un indulto que le había otorgado en diciembre de 2017 el entonces mandatario Pedro Pablo Kuczynski (PPK) y que había sido anulado diez meses después por la Corte Suprema.
“La restitución del indulto daría como resultado la liberación de Fujimori y la extinción de su pena, lo que afecta los derechos de las víctimas de crímenes de lesa humanidad, afecta su acceso a la justicia y lesiona su dignidad”, dijo la CIDH en un comunicado.
También “crea obstáculos para el pleno cumplimiento de las sentencias” de la Corte Interamericana en los casos Barrios Altos y La Cantuta.
Tras ser extraditado de Chile en 2007, Fujimori, que gobernó Perú entre 1990 y 2000, fue condenado por las masacres de Barrios Altos (15 muertos, incluido un niño) y La Cantuta (10 muertos), perpetradas por escuadrones militares durante su gobierno.
La CIDH recordó que en 2011 la Corte Interamericana de Derechos Humanos declaró que los hechos de La Cantuta constituyen “crímenes de lesa humanidad” y los de Barrios Altos “graves violaciones a los derechos humanos”.
Según el derecho internacional, no se pueden otorgar amnistías ni indultos a personas que hayan sido declaradas culpables de crímenes de lesa humanidad.
La CIDH, organismo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), insistió por ello en que el anuncio oficial de la restitución de los efectos del indulto sería una decisión contraria a las obligaciones internacionales del Estado peruano.