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La tercera fue la vencida: Lasso se impuso en elecciones presidenciales de Ecuador
Lasso era ministro de Economía cuando Ecuador adoptó el dólar estadounidense como moneda oficial a fines de la década de 1990. En contra de la mayoría de las proyecciones, el derechista Guillermo Lasso venció a Andrés Arauz este domingo para convertirse en el próximo presidente de Ecuador. La victoria de Lasso está asegurada con el 97,91% de los votos contados.
Los resultados provisionales le dieron a Lasso del movimiento CREO una victoria de 52,49% a 47,51% sobre Arauz, de la Unión por la Esperanza (UNES) del expresidente Rafael Correa.
Lasso, de 65 años, se desempeñó como Ministro de Economía durante la presidencia de Jamil Mahuad a fines de la década de 1990, cuando la crisis financiera e inflacionaria provocó un pánico bancario que llevó a Quito a adoptar el dólar estadounidense como moneda oficial.
Se postuló por primera vez a la presidencia en 2013, cuando perdió ante Correa y nuevamente en 2017, oportunidad en que fue derrotado por el actual presidente Lenin Moreno.
La participación fue de 10.211.509, mientras que los electoraas ausentes totalizaron 2.116.752. Los votos nulos ascendieron a 1.660.767 además de 163.912 votos en blanco. En 2017, Moreno ganó la segunda vuelta, por 51,16% a 48,84%.
Arauz, cuya candidatura había sido respaldada por Correa, admitió la derrota y calificó el resultado como un “revés electoral”, tras haber alcanzado el 32,72% de los votos en la primera vuelta cuando Lasso apenas consiguió sobrepasar Yaku Pérez, de extracción indigenista, por 19,74. % a 19,39%.
Lasso, vinculado al movimiento ultracatólico Opus Dei, es un economista orientado al mercado que favorece la reducción del Estado y sus gastos, promueve las privatizaciones y da la bienvenida a la inversión extranjera. Los primeros en felicitar a Lasso en Twitter fueron los presidentes de Colombia, Iván Duque, y de Uruguay, Luis Lacalle.
Lasso, de la alianza de centro derecha Creo-Partido Social Cristiano (PSC), pronunció un discurso de victoria desde la ciudad de Guayaquil. Pidió “trabajo conjunto”, restó importancia a las acusaciones de fraude en las encuestas a boca de urna y prometió un cambio “para sacar a Ecuador de los problemas actuales”.
Por su parte, Arauz anticipó que su fuerza política ahora “inicia una etapa ardua pero necesaria”.
“Hoy no es el final, es el comienzo de una nueva etapa del poder popular”, dijo Arauz. ”Gracias por todo tu apoyo. Honestamente creíamos que estábamos ganando, pero nuestras proyecciones estaban equivocadas. Buena suerte a Guillermo Lasso, su éxito será el de Ecuador. Solo les pido que detengan la guerra legal, que destruye vidas y familias”, agregó.
