Las autoridades de salud británicas informaron el lunes que la cantidad de muertes causadas por cualquier variante conocida del virus covid-19 se había reducido a cero, lo que se consideró un hito fantástico.
El éxito estuvo vinculado a una prolífica campaña de vacunación y al confinamiento prolongado. Las cifras oficiales de Public Health England (PHE) del 28 de marzo mostraron que no se habían registrado muertes en la capital dentro de los 28 días posteriores a una prueba de covid positiva.
Desde el inicio de la pandemia, 708.000 personas han dado positivo por coronavirus en Londres, 15.000 de las cuales murieron dentro de los 28 días de haber dado positivo en la prueba.
Durante el pico de la pandemia en abril pasado, se registraron alrededor de 230 muertes diarias relacionadas con el virus en Londres, con lo que ahora se esperaba que el gobierno relajara algunas de sus medidas más estrictas. De hecho, poco después de conocerse la noticia se han permitido reuniones sociales al aire libre de hasta seis personas y dos núcleos familiares diferentes. Otros informes indicaron que la regla de quedarse en casa ha sido reemplazada por un mandato de simplemente permanecer en el área local.
Londres fue el epicentro de la primera ola y alrededor del 12 por ciento de todas las muertes por covid en el Reino Unido ocurrieron en la capital. Durante ese tiempo, el University College Hospital tuvo hasta tres pacientes muriendo cada dos días. El médico de cuidados intensivos Jim Down dijo: “Nos quedan unos siete pacientes con covid-19 en la unidad de cuidados intensivos y esperamos que mejoren. Es una sensación maravillosa, pero plantea nuevos desafíos”.
No obstante, el primer ministro Boris Johnson ha recomendado a todos los ciudadanos que sean cautelosos, debido al aumento de casos en Europa continental y al surgimiento de nuevas variantes.