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Estados Unidos: El estado de Virginia firma abolición de la pena de muerte
“Hoy no hay lugar para la pena de muerte en esta mancomunidad, en el sur o en esta nación”, dijo el gobernador Northam. El gobernador de Virginia, Ralph Northam, promulgó el miércoles un proyecto de ley por el que se abolió la pena de muerte después de más de 400 años de vigencia, lo que convierte a su estado en el vigésimo tercero en dar ese paso.
La decisión legislativa es particularmente significativa ya que Viriginia, con 113 ejecuciones desde 1976, fue superada solo por Texas desde que la Corte Suprema permitió la reimplantación de la pena capital en 1976.
Virginia, uno de los usuarios más prolíficos de la letalidad penal desde 1608, es el primer estado en lo que fue la Confederación independentista de la última mmitad del siglo XVIII en abolir oficialmente la sanción máxima.
“Hoy no hay lugar para la pena de muerte en esta mancomunidad, en el sur o en esta nación”, dijo Northam, poco antes de firmar la legislación en el Centro Correccional de Greensville, donde anteriormente se llevaban a cabo las ejecuciones. La legislatura estatal había aprobado anteriormente proyectos de ley que pusieron de hecho fin a la práctica a fines de febrero.
Northam calificó la pena capital como “fundamentalmente defectuosa” y señaló que se aplicaba de manera desproporcionada a los negros. “Virginia tiene una historia larga y complicada como otros estados del sur”, dijo Northam. “El racismo y la discriminación de nuestro pasado todavía resuenan en nuestros sistemas hoy y mientras continuamos un paso más allá de la carga de ese pasado, es vital que también cambiemos los sistemas en los que la desigualdad continúa”.
En total, Virginia ha ejecutado a más de 1.300 personas, más que cualquier otro estado y, en el siglo XX, más de 296 de los 377 condenados que Virginia ejecutó por asesinato eran negros. Y desde 1976, casi la mitad de las 113 personas ejecutadas en el estado eran negras, al igual que ambos hombres que se encuentran actualmente en el corredor de la muerte y cuyas condenas se conmutarán automáticamente por cadena perpetua.
El Centro de Información sobre la Pena de Muerte (DPIC) ha señalado que tanto las condenas a muerte como las ejecuciones han alcanzado mínimos históricos en todo el país.
