La primer ministro de Escocia, Nicola Sturgeon, afirmó que espera que su país se independice del Reino Unido y regrese “pronto” a la Unión Europea (UE) tras el Brexit, al que la mayoría de los escoceses se opuso en referendo.
“Ahora estamos atravesando un Brexit duro contra nuestra voluntad, en el peor momento, en medio de una pandemia y de una recesión económica”, dijo Sturgeon en el sitio web de su partido independentista SNP.
Lo hizo dos días después que se concretara finalmente la salida del Reino Unido de la UE.
En el referendo de 2016, los británicos se pronunciaron mayoritariamente a favor del Brexit, con 51,9% de los votos, pero 62% de los escoceses rechazó la idea de abandonar la UE.
Sturgeon ratificó su voluntad de celebrar otro referendo sobre la independencia de Escocia, luego que en el último, celebrado en 2014, una mayoría de 55% de los escoceses rechazara esa posibilidad.
La decisión de convocar a ese referendo es una atribución del primer ministro británico, Boris Johonson, quien se niega, aunque una eventual victoria amplia del SNP en las elecciones de mayo próximo aumentará la presión sobre Londres para que acepte una nueva consulta, según estiman analistas políticos
De hecho, ahora 58% de los escoceses está a favor de la independencia, según una encuesta de la firma Savanta ComRes publicada por el periódico Scotsman a mediados de diciembre pasado.
“Como miembro independiente de la UE, Escocia sería un socio y podría construir puentes, no solo un puente para construir una economía más fuerte y una sociedad más justa, sino también un puente para facilitar relaciones entre la UE y el Reino Unido”, dijo Sturgeon.
“No queríamos irnos y esperamos regresar pronto como socio de pleno derecho”.