UNICEF informó que repartirá alimentos a menores sin recursos del Reino Unido por primera vez en sus 70 años, en momentos en que el país reporta un importante aumento en los contagios por la pandemia de coronavirus, que la agencia de la ONU definió como la crisis más urgente desde la Segunda Guerra Mundial.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) prometió una ayuda de cerca de 28.000 euros para el proyecto comunitario School Food Matters, que utilizará el dinero para suministrar 18.000 desayunos a 25 escuelas durante las dos semanas de vacaciones de Navidad y el semestre de febrero, para alimentar a los niños y familias vulnerables de Southwark, en el sur de Londres, informó el diario local The Guardían.
Unicef lanzó una campaña de respuesta de emergencia en Reino Unido por primera vez en sus más de 70 años de historia para ayudar a alimentar a los niños afectados por la doble crisis sanitaria y económica que azota tanto el país como el mundo.
El Reino Unido es el segundo país con más casos en Europa, casi 2 millones, y ya suma más de 66.000 decesos.
El anunció de Unicef generó críticas entre la oposición británica.
Según la agencia de la ONU, responsable de proporcionar ayuda humanitaria a menores de todo el mundo, la pandemia del coronavirus es la crisis más urgente para los chicos desde la Segunda Guerra Mundial.
Una encuesta de YouGov realizada en mayo por encargo de la organización benéfica Food Foundation concluyó que 2,4 millones de niños británicos (17%) viven en hogares con inseguridad alimentaria. Para octubre, otros 900.000 menores se habían apuntado para recibir comidas gratuitas en la escuela.
”El hecho que Unicef tenga que intervenir para alimentar a los niños que pasan hambre de nuestro país es una vergüenza y (el primer ministro) Boris Johnson y (el ministro de Economía) Rishi Sunak deberían estar avergonzados, reaccionó la número dos del opositor Partido Laborista, Angela Rayner.
Somos uno de los países más ricos del mundo. Nuestros niños no deberían tener que depender de organizaciones benéficas que están acostumbradas a operar en zonas de guerra y en respuesta a desastres naturales. Las organizaciones benéficas y las empresas de todo el país han hecho un trabajo brillante interviniendo donde el Gobierno falló, pero nunca debería haber llegado a esto.
Por su parte, un vocero del Gobierno de Johnson defendió la política social durante la pandemia.
Nos comprometemos a apoyar a las familias con menos ingresos durante y después de la pandemia. Por eso aumentamos el salario mínimo vital, incrementamos el apoyo a la asistencia social en miles de millones de libras e introdujimos el plan de subvenciones de la Covid-19 para el invierno”, aseguró.