Expertos franceses del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) informaron que, con ayuda de teledetección de muy alta resolución, descubrieron ”más de mil ochocientos millones de árboles en el Sahara occidental en África, dejando al descubierto nuevos ecosistemas y demostrando que a los seres humanos aún les hace falta conocer su planeta Tierra, sin contar lo desconocido en profundidades marinas.
A través de un comunicado, el CNRS de Francia explicó que esos “más de mil 800 millones” de árboles en Sahara occidental cubren “un área de 1.3 millones de kilómetros cuadrados o, aproximadamente, 2,5 veces el área de Francia”. Agregó que la teledetección de muy alta resolución permitió recopilar imágenes satelitales de estas regiones, que luego se analizarán vía un método de reconocimiento por inteligencia artificial.
“El tamaño de la copa de estos árboles en el Sahara es mayor de tres metros cuadrados y su número depende mucho del régimen climático y del uso del suelo. Estos árboles hacen una contribución importante a los recursos locales, la biodiversidad y el almacenamiento de carbono. Desempeñan un papel crucial en los ecosistemas y agrosistemas tropicales secos”.
El desierto del Sahara en general, es uno de los desiertos más amplios del mundo y abarca casi totalmente el norte de Africa, de este a oeste, desde Marruecos hasta Egipto. En cambio, el Sahara Occidental se refiere de forma particular a la zona del desierto localizada entre Marruecos y Mauritania. Expertos en geografía aseguran que la Antártida y el Ártico son los desiertos más extensos, seguidos del Sahara.
El desierto del Sahara ha sido escenario de curiosos hechos:: en abril de 2020 se puso en venta en Londres, Reino Unido, un pedazo de luna o roca lunar llamado NWA 12691; pesa más de 13.5 kilogramos y habría caído sobre el desierto del Sahara tras la colisión con un asteroide o cometa, completando un viaje de alrededor de 390 mil kilómetros a la Tierra desde la Luna; su costo fue de casi dos millones y medio de dólares.