Las noticias falsas y las cuentas automatizadas, también conocidas como bots, han sido uno de los mayores problemas de las redes sociales en los últimos años y es por esto que las diversas plataformas han decidido implementar medidas de mitigación para evitar su masificación.
Ahora, Twitter ha informado que los usuarios sólo podrán seguir 400 cuentas por día, en vez de las mil que se les permitía actualmente. La medida, de efecto inmediato, llega para frenar precisamente las actitudes sospechosas entre los usuarios ya que, según la propia compañía fundada por Jack Dorsey, no es posible para un usuario tradicional -o humano- seguir más de 400 cuentas en un único día con el fin de suscribirse a cierto contenido, por lo que una acción de este tipo requiere maquinaria detrás de su programación.
A través de una publicación de la cuenta oficial de Twitter es su propia red social la firma informó la decisión en un tono de burla preguntando: Seguir, dejar de seguir, seguir, dejar de seguir. ¿Quién hace esto? Los creadores de contenido no deseado, también llamados spamers.
Es por esto que decidieron cambiar la cantidad de cuentas que puedes seguir cada día de mil a 400. Tranquilos, van a estar bien, continuó la firma. Hemos encontrado que la gran tasa de seguidores diarios ha sido para contribuir a seguir a alborotadores, explicó un vocero de la compañía a Engadget.
Precisamente este término seguir a alborotadores es definido en el centro de ayuda de Twitter como el proceso de seguir y dejar de seguir cuentas con el fin de atraer la atención a algunas cuentas con la esperanza de recibir seguidores de vuelta y así aumentar sus números en la plataforma. Esto se suma a esfuerzos anteriores por parte de la red de 280 caracteres como evitar la publicación del mismo contenido por múltiples cuentas para así mantenerse lejos de actividades maliciosas que buscan atacar conversaciones cruciales que se desarrollan en Twitter.
En los últimos años las redes sociales han contribuido a la conversación política en diversos países en todo el mundo, un escándalo que arrastró a las grandes compañías después de que se destapó el escándalo entre Facebook y Cambridge Analytica.