La Justicia argentina sobreseyó al juez Claudio Bonadio, al que la defensa de la ex presidente Cristina Fernández denunció por abuso de autoridad en el registro a su domicilio en Buenos Aires, al investigar un supuesto caso de corrupción
Después de los allanamientos, que tuvieron lugar el pasado agosto, el abogado de la ex mandataria Carlos Beraldi acusó a Bonadio de abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, unos cargos de los que fue absuelto por el juez federal Sebastián Casanello, que también investiga a Fernández de Kirchner por otro caso de supuesta corrupción.
Beraldi denunció que se le había impedido “participar y controlar la materialización” del registro, pero en un fallo hecho público por el Centro de Información judicial el juez decretó que no podría haber delito por parte de Bonadio por “la complejidad de la medida, el número de auxiliares intervinientes y los recaudos dispuestos para documentar el registro”, entre otros puntos.
La investigación de la causa por abuso de autoridad recayó en el fiscal federal Eduardo Taiano, quien ya comunicó al juez Casanello que no apreciaba ninguna irregularidad en los allanamientos.
El abogado de Cristina Fernández ya denunció en aquel momento que las pruebas habían sido realizadas con el “inequívoco propósito de seguir generando estrépito y material para las tapas de diario” , y aseguró que se habían filtrado a la prensa resultados “absolutamente falsos” de los registros.
Los procedimientos en las propiedades de la ex mandataria, tanto el piso de Buenos Aires como sus casas en Río Gallegos y en El Calafate, ambas en la provincia de Santa Cruz, en el sur del país, fueron llevados a cabo tras la aprobación del Senado, necesaria por la condición de senadora de Fernández.
El juez buscaba en ellos pruebas para la “causa de los cuadernos”, en la que considera a la ex presidente la jefa de una asociación ilícita, en un supuesto entramado para cobrar sobornos de empresarios a cambio de concesiones de obra pública. En esa causa, Bonadio también pidió la detención de Fernández de Kirchner, aunque ésta fue rechazada por el Senado. Con el avance de la instrucción judicial han surgido varios colaboradores con la Justicia, tanto empresarios como ex funcionarios kirchneristas, que han admitido la existencia de la trama.