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Se multiplican protestas y caceroleos en Caracas y varios estados
En Caracas se han producido más de 20 protestas, tanto en zonas tradicionalmente opositoras como en sectores considerados bastiones del chavismo Cientos de venezolanos se manifestaron el martes, por segunda vez de noche, en contra del Gobierno de Nicolás Maduro, golpeando cacerolas desde el interior de sus casas o saliendo a las calles, especialmente en barriadas de Caracas y el interior.
Como ya es costumbre, la protesta se dio a conocer a través de las redes sociales, en las que circulan decenas de fotografías y videos que dan cuenta de los “cacerolazos”, algunos de los cuales en zonas del este de Caracas y en el cercano estado de Miranda.
Según los reportes de medios locales y de internautas las manifestaciones también ocurren en los estados Guárico (centro), Bolívar (sur), Mérida (oeste), Sucre, Anzoátegui (este), Carabobo, Aragua (norte) y Vargas, cercano a Caracas.
En la capital venezolana se han producido más de 20 protestas de este tipo, tanto en zonas tradicionalmente opositoras como en sectores considerados bastiones del chavismo como la parroquia Catia, donde salieron por segunda noche consecutiva decenas de manifestantes a las calles.
Estas expresiones de rechazo al Gobierno ocurren en la víspera de una manifestación nacional convocada por la oposición, en Caracas y en los 23 estados del país, para señalar al presidente Nicolás Maduro como “ ilegítimo” y como “ usurpador”.
Al menos una decena de protestas callejeras que se iniciaron la noche del lunes en Caracas se extendieron hasta la madrugada del martes, e incluyeron cortes de vías así como a personas en las calles gritando consignas antigubernamentales. Aunque ninguna autoridad se ha pronunciado al respecto, abundan las imágenes que muestran a las fuerzas del orden tratando de disuadir las manifestaciones de esta madrugada, en algunos casos disparando gases lacrimógenos en zonas residenciales.
El jefe del Estado obtuvo la reelección en unos comicios señalados de fraudulentos por la oposición y buena parte de la comunidad internacional, y juró su segundo mandato ante el Supremo hace casi dos semanas, con lo que se mantendrá en el cargo, al menos, hasta 2025.
